El Gobierno de Colombia y las FARC llegaron a un acuerdo para superar “diferencias recientes y normalizar las conversaciones”, con sede permanente en La Habana, según anunciaron hoy representantes de Cuba y Noruega, países garantes del proceso de paz en la nación suramericana.
EFE
En el comunicado los delegados de los países garantes no mencionan cuándo ni cómo volverán a Cuba el jefe negociador de las FARC, alias “Iván Márquez” y el guerrillero “Joaquín Gómez”, a quienes se acusó de violar las reglas acordadas con el Gobierno de no entrar en cascos urbanos ni hacer manifestaciones políticas.
“Se continuarán cumpliendo todos los compromisos adquiridos por las partes respecto a medidas de desescalamiento y fomento de la confianza”, indica el texto divulgado hoy en la capital cubana.
Aunque el proceso de paz de Colombia se encuentra ya en la fase final, la semana pasada estalló una nueva polémica cuando el presidente Juan Manuel Santos suspendió las visitas de los negociadores de la guerrilla a sus campamentos para hacer “pedagogía de la paz” entre sus filas.
El anuncio de Santos se produjo después de que se divulgaran unas imágenes en las que se ve a alias “Iván Márquez” y “Joaquín Gómez”, en un acto público con civiles en la aldea de Conejo, departamento de La Guajira, escoltados por guerrilleros armados; una violación según el Ejecutivo de las reglas acordadas de no tener contacto con la población civil, ni hacer manifestaciones políticas.
Para desbloquear la situación, en los últimos días se han mantenido intensos contactos implicando a las dos partes, con la mediación de los países garantes, incluyendo una reunión el pasado lunes en La Habana entre los cancilleres de Cuba y Noruega, Bruno Rodríguez y Børge Brende.
“Cuba y Noruega agradecen al Gobierno de Colombia y las FARC por la confianza depositada en los garantes y el espíritu constructivo con el que ambas partes contribuyeron al logro de los positivos resultados que hoy estamos anunciando”, subraya el comunicado.
Los representantes de los países garantes reafirmaron también su compromiso de “contribuir al avance de las conversaciones y al logro, en el menor tiempo posible, de un acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera en Colombia”.
El pasado septiembre, las partes se pusieron como fecha límite para firmar la paz el 23 de marzo, aunque existen dudas sobre las posibilidades de cumplir con ese plazo, ya que quedan pendientes de acuerdo temas delicados como el cese el fuego bilateral y definitivo, la dejación de armas o la concentración de guerrilleros para su desmovilización. EFE