¿Qué podemos decir de los demás farsantes? Ni hablar de Nicolás Maduro, quien por aquellos tiempos era un reconocido reposero en el Metro y un dirigente de tercera línea en la Liga Socialista. Lo más seguro es que ese día se haya escondido, tal como lo hizo el 11 de Abril del 2002, cuando se enconchó en Cúcuta junto a Doña Cilia. Con conocimiento de causa podría referirme a las andanzas de muchos otros jerarcas de la “revolución” en aquellos días convulsos pero francamente no creo que sea necesario. En efecto, hoy la gente sabe que estamos ante una burocracia inmoral, corrupta y mentirosa. Además, si en el pasado algunos participaron en luchas sociales –como ciertamente lo hicieron- su ejecutoria en esta etapa “revolucionaria” mancha cualquier hoja de servicio. El silencio ante la permanente violación de Derechos Humanos y la voraz corrupción que desangra a nuestra Venezuela, es suficiente para sentir repugnancia por estos filibusteros desalmados, cuya indolencia ante el sufrimiento del pueblo es indignante. No hace falta a ahondar en la crisis social, económica y moral que agobia al país –todos la sufrimos en carne propia- lo pertinente es colocar el acento en la actitud del gobierno desconociendo la calamitosa realidad, hablando de un país inexistente, donde esta tragedia cotidiana que todos vivimos es algo ficticio, una manipulación mediática o una consecuencia de la “guerra económica”. Ya ese discurso es humillante, insulta a los venezolanos y nos advierte claramente que la crisis se va a profundizar pues el gobierno no tiene intención de rectificar y al contrario, es el principal obstáculo para el cambio. La piedra de tranca no es sólo Nicolás Maduro –a quien hay que revocar el mandato- el problema es un modelo fracasado y una cúpula responsable del naufragio de un país maravilloso que estamos obligados a salvar. En fin, eso hay que tenerlo muy claro: ya el problema no es político, no es un desencuentro, ni una coyuntura. Nada de eso, estamos en una situación mucho peor que aquel 27 de Febrero, al borde de un colapso. ¡Cambiar al gobierno es salvar a Venezuela!
Twitter: @richcasanova
(*) Dirigente progresista / Vicepresidente ANR del Colegio de Ingenieros de Vzla.