Este fin de semana el diputado de Caracas y Presidente de la Comisión de Servicios de la Asamblea Nacional, Stalin González, realizó varios encuentros con los vecinos de los sectores Santa Eduviges, en Carapita; UD4 de Caricuao y Las Adjuntas, en Macarao; donde escuchó atentamente los problemas que aquejan a las familias de estas zonas y que no escapan de la realidad que se vive en todo el país.
Entre una parroquia y otra la exigencia se repetía. Aseguraban que el servicio de agua no es continuo, que las fallas eléctricas son notables y la basura les abruma diariamente; todo sin contar con los problemas de inseguridad que azota a los distintos sectores.
A esto, González reiteró que “pagarle al gobierno por un servicio que no es seguro y constante es estafar a los venezolanos. No es justo que aparte de los problemas económicos y sociales del país, a los venezolanos se nos niegue, por ineficiencia, corrupción y falta de planificación, disfrutar de un derecho humano como lo es el agua; y además se nos exija cumplir con un racionamiento eléctrico gracias a las mismas razones”.
Explicó además que el tema se acrecentaba aún más fuera de Caracas, “donde estados como Vargas, Nueva Esparta, entre otros, la situación era extrema. El acceso al servicio de agua, por ejemplo, para muchos venezolanos hoy es un privilegió, y a veces, un lujo, por tener que pagar cisternas para disfrutar de tan vital líquido”.
Agregó además el diputado que esperan esta semana poder contar con los informes detallados de las obras, proyectos, planes, cronograma para el suministro del servicios y el análisis de potabilidad del agua en Venezuela que prometió la Presidenta de HIDROVEN y su filial Hidrocapital, consignar ante la Asamblea Nacional, luego de su interpelación el pasado 27 de enero, pues para González, “aún quedaron muchas preguntas sin responder al país en cuanto a las fallas de inversión y recursos presupuestados y que hoy deberían haber servido para enfrentar la emergencia, sin excusarse en el famoso Niño o tras las fuertes sequías, que son previsibles, y por ende, sujetos a posibles planificaciones para enfrentarlos”.
De esta manera aseguró que “de haberse hecho lo que en principio se prometió bajo un gasto de más de 9. 500 millones de dólares”, cifra, dijo, que reconoció la casa matriz del sector de agua potable y saneamiento, HIDROVEN, para satisfacer la demanda de agua de más 95% de la población, “muchos gozaríamos de un servicio agua continuo, pero la realidad es distinta”.
Finalmente, el Presidente de la Comisión de Servicios de la Asamblea Nacional, fue enfático al recordarle a Siboney Tinedo, presidenta de HIDROVEN y a Evelyn Vásquez, de la filial Hidrocapital, que “tienen una deuda con el país”, exhortándolas a concretar el cronograma de inspecciones necesarias a las obras previstas, así como fijar la fecha de entrega de los documentos acordados para elaborar el informe final de la gestión de estas empresas estatales, “pues mucho tienen que ver su deficiente administración y manejo que ejercen sobre la gran mayoría de los sistemas de suministros del vital líquido con la crisis de agua”.