La cadena conservadora Fox emitió hoy un duro comunicado contra el precandidato republicano a la Casa Blanca Donald Trump por sus “ataques sexistas” y su “obsesión enfermiza” contra la popular presentadora Megyn Kelly.
EFE
“Los corrosivos ataques de Donald Trump contra Megyn Kelly y su extrema y enfermiza obsesión con ella están por debajo de la dignidad que debe tener un candidato presidencial que quiere ocupar el más alto cargo en la tierra”, consideró la cadena en una nota.
La cadena se pronunció en este sentido después de que el magnate llamara ayer en su cuenta de Twitter a boicotear el programa de Kelly, tras meses de comentarios ofensivos contra la presentadora.
“Todo el mundo debería boicotear el programa de Megyn Kelly. Nunca merece la pena verlo. Siempre ataca a Trump. Está enferma y es la persona más sobrevalorada de la televisión”, escribió el multimillonario en su cuenta en la red social.
Como en ocasiones anteriores, Kelly evitó el cuerpo a cuerpo con Trump y fue la cadena Fox la encargada de responder al magnate, con su comunicado más duro hasta el momento.
“Megyn es una periodista ejemplar y una de las principales presentadoras de Estados Unidos. Estamos extremadamente orgullosos de su fenomenal trabajo y continuamos apoyándola completamente ante la diaria e infinita descarga de ataques verbales sexistas y crudos de Donald Trump”, aseguró la cadena en su nota.
Trump comenzó a lanzar duros ataques contra la popular presentadora de Fox tras un debate en agosto en el que Kelly le preguntó por sus comentarios despectivos contra las mujeres, tales como “cerdas gordas”, “guarras” y “animales asquerosos”.
Tras ese debate, el magnate se refirió a ella en Twitter como “perdedora” y “barbie”, y llegó a decir en CNN que “le salía sangre por los ojos, le salía sangre de su lo que sea”.
En enero, Trump no asistió al debate de Fox en Iowa porque la cadena rechazó su exigencia de que Kelly no estuviera entre los moderadores.
El 3 de marzo, Trump exhibió un tono conciliador con Kelly en otro debate de la cadena, en el que la periodista no cesó de hacerle preguntas incisivas que tanto han irritado al magnate.
La cadena republicana se vio obligada esta semana a cancelar el debate previsto para el próximo lunes en Utah después de que el magnate rechazara participar, al considerar que ya ha tenido suficientes debates.