Venezuela está en etapa de ebullición y cada vez con más fuerza. Pero atención, no es que hierva una parte y la otra esté normal, en este caldo no hay escondrijos y cualquier reventón se reflejará en todas las áreas y niveles de la sociedad venezolana, e impactará sin la menor duda en los partidos políticos, cuya militancia y simpatizantes buscarán reacomodos. Nada anormal en estos tiempos de cambios y ansiedad de refrescamiento, pero cuando el agua burbujea no hay partes ocultas y nadie puede prever a dónde irán a saltar las burbujas.
En la unidad democrática las cosas están al rojo vivo, no hay manera de evitar lo inevitable, la factura vendrá más temprano que tarde, la pugna por imponer criterios es a muerte, las candidaturas presidenciales adelantadas dan vergüenza, las amenazas van y vienen, la pelea por las gobernaciones es una batalla épica, a tal punto complicada y feroz que algunos de la MUD y del madurismo parecen estar conversando sobre atrasarlas hasta el próximo año.
Hay gobernadores que se sienten señalados por el dedo divino y sueñan con trabajar en Miraflores y dormir en La Casona, sin atender a que esos sueños son, de entrada, causales de división en el peor momento, justo cuando el país arde. Otros mandatarios regionales son acusados de atender poco sus despachos y obligaciones regionales, no pocos son tildados, pura y simplemente, de sinvergüenzas. ¿Tiene algún sentido posponer las elecciones de Gobernadores? Aunque unos meses más no aumentaran la fama a los que sienten que ya están listos para ser presidentes, hay que reconocer que algunas oportunidades extras proveerán.
Algo similar en el país y obviamente en la oposición, que no tiene tiempo y equivocadamente no lo busca para lamer sus heridas. En el Psuv las cosas tampoco están de amor y paz, allí también comienzan a sentirse las diferencias y las hacen públicas. Maduro ha logrado que lo monolítico del chavismo se fracture; más que lograrlo, que es algo de fuerza personal, quizás no ha tenido más remedio, ¿cómo puede ser jefe auténtico, firme, confiable, del chavismo después de Chávez? Venezuela perdió poco con la muerte de Hugo Chávez, pero el chavismo lo perdió todo excepto un poderío que los sucesores oficiales del comandante fundador han demostrado, a lo largo de estos años y sin fallar un día, que no tienen idea clara de cómo manejarlo.
En todo caso, si estamos conscientes de que el país va muy mal, de que la patria hierve, y pareciera por las encuestas que muchos venezolanos ya tenemos esa conciencia clara, algo bueno podría salir. Que tres cuartas partes –y creciendo- de los ciudadanos estén convencidos de que la situación va de mal en peor, y de que Maduro y el madurismo no son creíbles para arreglar aunque sea en algo la situación, es, visto desde otra perspectiva, un pasito de avance. Esta complicadísima situación lejos de ser dañina para la democracia –que está vinculada a la economía pero es cosa distinta- por el contrario la fortalece, la hace más fuerte y permite al ciudadano elegir entre diferentes opciones sin ser catalogado de traidor como cuando se está en medio de dos polos, dos opciones únicas como hasta ahora entre el Psuv/Polo Patriótico vs MUD/AD/PJ/VP y el amplio y jacarandoso etcétera de partidos, partiditos y movimientos diversos.
Cuando finalmente vengan esas elecciones, será sano que tengamos varios candidatos para las gobernaciones y diputados diversos a los concejos legislativos de los estados, no sólo dos listas obligatorias. Va a ser interesante ver a la MUD y opositores diversos abriéndose a la democracia real, y más interesante aún ver al pueblo venezolano ejerciéndola como siempre lo ha hecho, con tranquilidad e interés para equivocarse, tanto como se ha equivocado varias veces, como para acertar y elegir a los mejores, que también lo ha hecho.
Más llamativo, incluso fascinante, será ver el ejercicio de la democracia en el hoy controlado Polo Patriótico. Sin duda la mayor participación será del PSUV, lo cual no es necesariamente malo porque un empeño democrático de los psuvistas puede llevar a que se quiten de encima algunos pesos excesivamente molestos por su corrupción y desprestigio, no pareciera que el PSUV siga siendo un partido de primera línea si no se sacude a quienes lo están llevando al derrumbe, hay potencia renovadora en ese partido en busca de nuevas perspectivas, con Chávez como remoto recuerdo y autoridades nuevas, más frescas y liberadas de los pecados actuales.
El resto del Polo Patriótico ha sido siempre, y hasta donde se puede prever seguirá siendo, poca cosa, uno que otro puesto que sin Chávez y el PSUV de poco valen ni sirven. En el PSUV las individualidades sobresalen, pero es parte de un proceso que puede irse autocorrigiendo progresivamente. Individualidades las habrá siempre en los movimientos políticos, no se llega a Gobernador, Alcalde, diputado o concejal disimulado entre una masa, y esas personalidades que quieran conquistar posiciones tendrán que ganárselas, eso es fundamental en el sano desarrollo democrático porque para ganar candidaturas y votos cada quien necesita a la estructura partidista, precisa captar, aliar y liderar para poder triunfar.
Los más recientes procesos electorales regionales, incluyendo las legislativas de diciembre pasado, mostraron que las cosas van cambiando tanto en la MUD como en el PSUV y el Polo Patriótico. Hubo candidaturas impuestas, eso es innegable y negativo, pero también estructuras políticas organizadas, trabajadoras y eficientes. Todo indica que van a crecer en los estados, y que cada vez le costará más a las cúpulas de Caracas u otras capitales imponer candidatos que no se hayan ganado previamente las voluntades locales.
En ambos lados del escenario político partidista se planean transformaciones y se utilizan palabras como refundar, reactivar, rejuvenecer, resolver crisis y frases como: “estar por encima de posiciones ideológicas y partidistas para satisfacer al ciudadano”; “el mundo está en innovación permanente”; “soy chavista y siempre seré chavista el hecho que lo critique no significa que cambie”; “gobernar para todos”; “se ha creado un complejo de que quien dialoga es traidor”. Es un nuevo y gran debate que denota una sincera intención de conexión ciudadana que sin duda tendrá sus detractores y adversarios como también sus simpatizantes y promotores. Con la actividad de todos se fortalecerá la democracia a través de los ciudadanos.
Venezuela tiene por delante mucho camino por recorrer para que éste tan ansiado y anhelado cambio comience a dar sus frutos y empiece a visualizarse, muchos surgirán y otros se quedarán en el camino pero hay que insistir en la pluralidad de opciones y plena libertad para tomar decisiones, apoyar a quien o quienes nos satisfagan más y mejor como realidades de crecimiento en Venezuela. Allí está la gran fuerza de la democracia, tan potente en nuestro país que ni siquiera el chavismo en sus momentos de mayor fortaleza pudo quebrantar el instinto democrático de los ciudadanos.
El espíritu de la libertad es clave, la libertad es vital, por eso después de la vida, el ser libre, es lo más importante del ser humano.
@ArmandoMartini