¿Fue un acto voluntario o lo mandaron? Los acontecimientos de los próximos días quizás despejen esa interrogante.
Por lo pronto, su acción sirvió de gota que rebozó el vaso para que la Dra Rocío San Miguel le cobrara su desparpajo solicitando su destitución ante la AN. Una verdadera “papa caliente” para la Mesa de la Unidad Democrática, cuya gestión al frente del parlamento comienza a recibir los flechazos de la gente desesperada. Laureano Márquez dijo, pidiendo el revocatorio para Maduro, estar “a esto” de revocar también a la oposición.
La pregunta que surge es ¿qué hará la MUD con la muy bien fundamentada petición de la sra. San Miguel? ¿Responderá con evasivas o agarrará el toro por los cachos? Son inminentes los tiempos de definiciones sobre ¿cuál es la verdadera ruta del cambio democrático?