Se cree que es simple: si se gastan más calorías de las que se ingieren, se adelgaza. Pero la ciencia ha llegado a decirnos que no es tan así. Un nuevo estudio sostiene que ante el mismo ejercicio físico, una persona puede perder peso, ganarlo o mantenerse estable.
Con la participación de 81 mujeres sedentarias y excedidas de peso se descubrió que al finalizar un programa físico de 12 semanas, el resultado fue sorprendente: El 70 por ciento de las mujeres habían aumentado su masa corporal, por grasa y no músculo.
Sin embargo, todas habían desarrollado mayor resistencia aeróbica. También se notó que aquellas mujeres que sí habían comenzado a perder peso durante el primer mes, continuaban con el mismo patrón de adelgazamiento luego.
Las recomendaciones fueron que al cabo de un mes de ejercicio, si el peso sigue igual, entonces es necesario mirar otros aspectos de la vida diaria como alimentación y actividades.
Aunque este nuevo descubrimiento desvincularía al ejercicio del peso para algunas personas, es importante tener en cuenta que no sólo es necesario hacer actividad física para bajar unos kilos. El deporte, en cualquier de sus formas, ha demostrado tener increíbles propiedades para la salud.
¿Por qué debería preocupar esto a los latino?
Casi el 55 por ciento de la población es obesa, acorde a la Universidad del Estado de Arizona, y los latinos como población dominante tienen un alto índice de sobrepeso: más del 60 por ciento lo tienen o padecen obesidad.
Entre ellos, los niños y adolescentes lideran el rango, ya que entre muchas madres latinas aún persiste la creencia popular de que ser robusto es sinónimo de salud, entre otras razones.