El reciente Boletín Epidemiológico de Salud Miranda, correspondiente a la semana del 03 al 09 de marzo, señala que los casos sospechosos de Zika continúan en descenso en la entidad, al pasar de 32 en la medición anterior a 21. No obstante, el epidemiólogo de Salud Miranda, Miguel Viscuña, advierte que pese a dicho bajón, se puede esperar una segunda ola epidémica al comenzar el periodo de lluvias en el país.
Nota de prensa
“La densidad vectorial del aedes albopictus o mosquito tigre, que es el que abunda en jardines y patios, ha disminuido por la ausencia de precipitaciones; pero al iniciar el periodo de lluvias, con la formación de charcos y lagunas, reaparecerán dichos agentes transmisores, y con ello un aumento en el riesgo de contagio en la población susceptible”.
Dijo que el acumulado en lo que va de 2016 es de 625 eventos de Zika y una tasa de incidencia de 19,4 casos por cada 100.000 mirandinos, “lo que indica que el comportamiento de la epidemia en Miranda está iniciando una fase de plato o meseta, en la que los casos disminuyen su intervalo de crecimiento y su velocidad de expansión, por ahora”.
Viscuña detalló que en la transmisión de la fiebre Zika así como Dengue y Chikungunya, hay dos vectores que están involucrados, el aedes aegypti y el aedes albopictus, lo que incrementa el riesgo de padecimiento, pero explicó que actualmente, por la fuerte sequía y el racionamiento de agua que se registra en el país desde principios de año, predominan los mosquitos intradomiciliarios (en el interior del hogar), el aedes aegypti o patas blancas, debido a la proliferación de depósitos de agua.
Casos de diarreas aumentaron 2,4%
La Red de Salud Francisco de Miranda ha contabilizado un total de 914 casos de diarreas en la entidad durante las últimas tres semanas, asociadas, según el director de epidemiologia regional, a las fallas en el suministro de agua, a la escasez de jabón y otros productos de higiene personal, así como a la ineficiencia del Ministerio de Salud en el control sanitario de los expendios de alimentos.
Indicó que en la reciente medición epidemiológica, correspondiente a la semana número 14 del año, desde el 03 al 09 de marzo, esta enfermedad infecciosa de transmisión hídrica y alimentos, aumentó un 2,4%, al pasar de 352 casos en la notificación anterior a 362.
Viscuña recordó que para la prevención de dicha afección gastrointestinal se debe evitar el consumo de alimentos crudos, frutas sin pelar, pastelería hecha a base de cremas, cubitos de hielo, jugos y helados de venta ambulante, así como abstenerse de consumir alimentos en sitios de dudosa calidad en su manipulación. Además, insistió en el lavado de las manos con agua y jabón después de ir al baño, de cambiar pañales y antes de comer o manipular alimentos.
Recomendó a quienes presenten síntomas de diarreas consumir abundante agua potable, sopas o infusiones para evitar un cuadro de deshidratación debido a la pérdida de líquidos y minerales.