El nutrido grupo de hombres se dirigió a la casa de Jairo Rivas, alias “El Palo e Bollo“ en la ciudad de San Francisco, en el estado venezolano de Zulia, con el expreso fin de matarlo.
Por: Antonio María Delgado/El Nuevo Herald
Rivas, un conocido delincuente, había asesinado horas antes a un hombre de 25 años y los familiares y amigos de la víctima estallaron en cólera cuando se enteraron. Pero, en lugar de llamar a la policía, salieron a buscar al homicida.
Según la prensa local, el grupo llegó a la humilde vivienda temprano en la mañana del lunes 18 de abril. Los moradores de la zona, quienes se preparaban para iniciar sus labores del día, fueron sorprendidos por una serie de detonaciones de armas de fuego.
Cuando se atrevieron a asomarse, vieron al grupo de hombres extraer de la vivienda a un muchacho que temblaba de miedo y a quien procedieron a golpear salvajemente.