El ministro español de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, defendió la liberación de “presos políticos” en Venezuela como condición para que se produzca un diálogo nacional en ese país y añadió que si eso ocurriera, el embajador español en Caracas volvería hoy mismo.
García-Margallo hizo estas declaraciones a los periodistas tras su participación en el acto de inauguración del Foro de la Alianza de Civilizaciones que se celebra en Bakú, la capital de Azerbaiyán.
“Lo importante en Venezuela es que se produzca un diálogo entre la Asamblea y el Gobierno, que las dos partes respeten las competencias el uno del otro”, afirmó el ministro.
Para que esa reconciliación o diálogo nacional sea posible, continuó el jefe de la diplomacia española, “es precondición la liberación de todos los presos políticos en Venezuela”.
“No es imaginable un diálogo sincero que pueda conducir a esa reconciliación por la que abogamos sin que los presos estén fuera”, agregó el titular de Exteriores.
Aseguró que España no pide a Venezuela nada que no haya hecho este país ya que, recordó, la Transición española y la Constitución vino precedida por dos amnistías: una en 1976 para delitos que no fuesen de sangre y otra después de la Carta Magna que incluyo todos los delitos cometidos hasta entonces.
García-Margallo se refirió a la proposición no de ley del PP que se debatirá mañana, miércoles, en el Congreso de los Diputados que pide la “inmediata” liberación de los presos políticos venezolanos y que obligará a todos los partidos a fijar una posición sobre el Gobierno de Nicolás Maduro y la situación de la oposición.
“España hace muy bien, el Parlamento hace muy bien en pedir la liberación de los presos que es la condición necesaria para que se produzca ese diálogo que culmine en la reconciliación y el respeto al Estado de derecho”, añadió el ministro.
Sobre el embajador español en Caracas, Antonio Pérez Hernández, que está llamado a consultas, y preguntado cuándo se prevé su vuelta al país latinoamericano, García-Margallo dijo: “Vamos a ver cómo van las cosas. Para ser muy claros: Si se produjese una liberación de los presos, el embajador de España cogería el avión esta misma tarde”.
España elevó el pasado 8 de abril su protesta ante Venezuela tras los “intolerables insultos” de Nicolás Maduro al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, al llamar a consultas a su embajador en Caracas, que supone su retirada temporal del país caribeño.
Es la segunda vez en esta legislatura que el Gobierno de Mariano Rajoy retira a su embajador en Venezuela.
Maduro llamó a Rajoy “racista, basura corrupta y basura colonialista”, y le volvió a instar a que respete al país latinoamericano. EFE