La velocidad con la cual la oposición unida logró recoger todas las firmas podría decirse que es un acto histórico que será recordado en los próximos 100 años. Esa celeridad se dio en el marco de un proceso que de antemano iba a realizarse en forma organizada para que cada ciudadano que estampara su rúbrica por un país sin odios ni chantajes políticos pudiese ser localizada por los partidos u ong’s que hacen vida en la MUD y de esa forma ayudar en el proceso de auditoría que el órgano electoral realizará. Es decir, no se trataba sólo de firmar, había que generar un ejército organizado contra la trampa y el servilismo del ente electoral para con el gobierno. Y esto se logró.
No queda duda de que a pesar de las naturales diferencias que coexisten en la mesa de la unidad, ha prevalecido, y así deberá seguir, un objetivo común mucho mayor que es el de garantizar de forma democrática y pacífica un cambio de gobierno que trabaje para la gente, para resolver sus problemas y generar oportunidades para todos.
La MUD debe aprovechar este momento para seguir transmitiendo fuerza y unidad al país. El gobierno por todos los medios seguirá tratando de debilitar esa unidad, de fragmentar la voluntad de cambio de la mayoría del país. Insistirán en generar ruidos internos que hagan que los venezolanos duden de la posibilidad real de revocar a Maduro y su combo de ineficientes e irresponsables.
Pero lo que hagan será en vano. El pueblo ya decidió y los partidos políticos que representan a ese pueblo deberán seguir actuando como lo hicieron con esta primera recolección de firmas, organizados, coordinados, sin querer sacar ventajas individuales, porque de lo contrario se le daría un espacio al gobierno de maniobra que no nos podemos permitir.
Sigamos adelante con la convicción de que finalmente estamos viendo la tan añorada luz al final del túnel, no caigamos en la desesperanza que el gobierno hábilmente tratará de infundirnos. No podrán. Maduro saldrá del poder. La ruta del cambio, que incluye el referéndum revocatorio, es imposible detenerla porque está siendo construida por más del 75% del país en forma activa.
Carlos Valero
@carlosvalero08