Ante la decisión del Gobierno Nacional de no dar clases los viernes, el alcalde de Chacao, Ramón Muchacho impulsa una iniciativa que busca convertir plazas y parques en aulas para los niños y jóvenes. Con profesores destacados en diversas áreas, los espacios públicos del municipio se han convertido en grandes salones de clases donde participan personas de todas las edades.
Nota de prensa
“Esta es una actividad de protesta en positivo en contra de una medida irresponsable. Nosotros nunca estaremos de acuerdo con el cierre de las escuelas y el impacto negativo en la educación y el desarrollo del país que eso representa. Por ello, decidimos que en Chacao habrá clases, si no en las aulas en las calles. Todos los padres queremos que nuestros hijos aprendan cada día más, sin ideologización de ningún tipo y se formen para que sean garantes de su propio futuro”, destacó el alcalde capitalino.
“Yo me pregunto ¿cuánta electricidad se ahorrará si sacas treinta niños de un salón de clases y los metes en sus casas donde también consumen electricidad?, ¿Es esa la solución para el problema de la energía eléctrica?”, cuestionó la máxima autoridad municipal, al tiempo que exhortó al Ejecutivo a rectificar la medida que perjudica a los estudiantes y pone en riesgo el año escolar.
Al mantener el Gobierno Nacional la disposición que perjudica a los estudiantes de todo el país, la Alcaldía realizó la segunda Jornada de Clases Magistrales, esta vez en la Plaza Bolívar y con tres invitados de alto calibre, en la actividad que concentró a más de un centenar de personas.
El profesor José Rafael Briceño inició con una clase sobre dicción en la que enseñó al público cómo usar adecuadamente la respiración para proyectar la voz y la forma para pronunciar correctamente las vocales pues “hablar bien es una herramienta poderosa”.
Luego fue el turno del historiador Elías Pino Iturrieta que dio una lección sobre la Generación del 28, en la que destacó las motivaciones y formación del movimiento que alzó la voz ante una dictadura que no daba espacios para la expresión ciudadana. “Hoy debemos honrar una gesta de héroes civiles, que no tenían fusiles ni bayonetas, que simplemente querían leer, expresarse, es la historia de líderes del futuro que no pensaban en serlo y que se juntaron por razones humanas antes que políticas”.
Aprovechó la oportunidad para destacar esta forma de protesta cívica y pacífica, no solo por función pedagógica, sino porque “llama la atención sobre las carencias educativas y sobre una medida absurda y que le corta las alas a las nuevas generaciones. Así no se forma un país”.
Finalmente, Bettsimar Díaz hizo una remembranza del Tío Simón, en clave de copla y décimas, acompañada de Luis Pino en el cuatro. Se paseó por la historia de su padre, su pensamiento y anécdotas y junto al público entonó “La vaca mariposa” y “Caballo viejo”.