El ejemplar Nyquist, con monta del jinete mexicano Mario Gutiérrez, confirmó su favoritismo al ganar este sábado el 142º Derby de Kentucky, la primera de las tres carreras de la Triple Corona de la hípica estadounidense
Entrenado por el reconocido Doug O’Neill, Nyquist ganó su octava carrera esta temporada tras colocarse a la cabeza del pelotón a la salida de la últma curva y aguantar la embestida final de Exxagerator y Gun Runner.
Gutiérrez se había impuesto en las dos primeas carreras del Gran Slam de 2012, el Derby y el Preakness Stakes, pero una lesión sacó a su monta I’ll Have Another de la tercera carrera, el Belmont Stakes.
“Esta vez Diosito me ayudó, y él (Nyquist) se portó muy valiente en ese tramo final”, dijo el veracruzano Gutiérrez, abrazado al cuello de su caballo.
Nyquist se convirtió en el quinto caballo desde 1990 que gana saliendo de la difícil gatera N. 13. El último en lograrlo había sido Smarty Jones en 2004.
“Sabía que si lo sacaba del medio del pelotón tenía una oportunidad, y por suerte el mismo caballo encontró por donde colarse”, apuntó Gutiérrez.
Por tercer año consecutivo un jockey mexicano se impone en Kentucky, luego de que Víctor Espinoza triunfara en 2014 con California Chrome, y repitiera en 2015 con American Pharoah, camino a la conquista de la Triple Corona.
“Simplemente es un caballo tan especial”, indicó el entrenador O’Neill a la cadena NBC Sports al terminar la carrera.
Nyquist, un potro castaño de tres años de edad criado en Kentucky e hijo de Uncle Mo, terminó la distancia de 1 1/4 de milla en 2:01.31 minutos, para sacar cuerpo y medio a Exaggerator y tres cuerpos y cuarto a Gun Runner.
La carrera se corrió bajo un clima cálido y soleado, con la asistencia de 167.227 espectadores, la segunda más alta en el hipódromo de Churchill Downs desde el récord de 170.513 del año pasado. AFP
