El canciller del Vaticano, monseñor Paul Richard Gallagher, viajará a Venezuela esta semana para seguir de cerca la evolución de lo que la Santa Sede ha denominado una “situación preocupante” en el país caribeño y que ha motivado una carta del papa Francisco al presidente Nicolás Maduro en reclamo de diálogo con la oposición, publica el portal ellitoral.com .
“En los próximos días viajará a Venezuela el secretario para las relaciones con los Estados, monseñor Paul Gallagher. Será una ocasión para cualquier coloquio”, aseguró el secretario de Estado vaticano Pietro Parolin en declaraciones en Lituania, donde se encuentra de visita oficial.
Días atrás, el propio Parolin aseguró en diálogo con Télam que “la situación en Venezuela es preocupante”, al tiempo que confirmó que el papa Francisco pidió “diálogo” al gobierno de Nicolás Maduro “como única solución a los problemas”.
“La situación venezolana es muy difícil, preocupante. Hay una necesidad de buena voluntad para encontrar vías de diálogo, que es la única solución al problema”, aseguró el ex Nuncio (embajador) en el país caribeño, que confirmó que el papa Francisco envió una carta al presidente venezolano Nicolás Maduro para pedirle “diálogo con la oposición”.
“Fue una carta en la que se pide el diálogo para facilitar el encuentro entre gobierno y oposición. Dar respuesta a los problemas graves y reales, y creo que la única manera es que lo hagan juntos, con diálogo”, agregó Parolin antes de participar en la presentación de la nueva edición de un mensuario que la Santa Sede dedica a las mujeres,”Donne, Chiesa, Mondo”.
Este fin de semana, la Pontificia Comisión para América Latina emitió un comunicado en el que llama la atención sobre una “profunda crisis política, económica y social que vive la hermana nación de Venezuela”.
“Se trata, sin ninguna duda, de la peor crisis nacional de Venezuela en la era republicana”, agrega el texto del organismo pontificio que describe que “a una inflación de más del 700% y al progresivo desabastecimiento de insumos básicos se ha sumado ahora la peor crisis energética de su historia, que ha llevado a cerrar numerosas instituciones públicas, entre ellas muchos centros educativos, y a reducir al mínimo las horas laborables para los empleados públicos”.
“Paradójicamente el gobierno venezolano acaba de anunciar otro aumento salarial, pero aún con ello, el sueldo mínimo no alcanza para cubrir la tercera parte de la canasta familiar”, agrega la misiva, que critica que “en el campo político son muy altos los niveles de polarización entre el gobierno y la mayoría opositora del parlamento, situación que se ha agudizado aún más con la convocatoria nacional a un referendo revocatorio, que sólo en dos días logró recolectar más de dos millones y medio de firmas”.
En este marco, el pasado miércoles, Parolin recibió de manera privada al padre del encarcelado dirigente venezolano Leopoldo López, Leopoldo López Gil, quien antes había saludado al Pontífice durante la Audiencia General.
“Pude saludar al Papa en la Audiencia General y me llevo la bendición que le vinimos a pedir”, afirmó López Gil en diálogo con Télam en la Plaza San Pedro, al tiempo que resaltó el llamado al diálogo que hizo Francisco a al gobierno de Venezuela en una carta personal enviada en los últimos días.
En el escrito, el Papa pide al mandatario que establezca con “urgencia” un canal de diálogo con la oposición, centrado en “las coincidencias” que tengan, más allá de la alta polarización que atraviesa el país, informaron fuentes vaticanas a Télam.
“La seriedad de la situación aparece claramente también en la reciente declaración de los obispos del 27 de abril, al tiempo que el nuncio (en Caracas, Aldo) Giordano se ha empeñado muy claramente en favorecer el diálogo auspiciado por el Papa”, agregó el portavoz papal Federico Lombardi a Radio Vaticana, en referencia al llamado del delegado religioso que aseguró: “La nunciatura esta aquí para contribuir al bien del pueblo de Venezuela”.
Lombardi dijo que “el Papa está siguiendo con gran atención y participación la situación en Venezuela”, y recordó “los comentarios públicos más recientes” del pontífice, en especial el elocuente pasaje que dedicó a este país en su mensaje Urbi et Orbi de Pascua.
Entonces, Francisco pidió que el mensaje pascual “se proyecte también sobre el pueblo venezolano, en las difíciles condiciones en las que vive, así como sobre los que tienen en sus manos el destino del país, para que se trabaje en pos del bien común, buscando formas de diálogo y colaboración entre todos”.