Con dignidad, Leopoldo López habría puesto en su lugar a este mediano mediador, al venirle con unas propuestas poco claras y entreguistas de la lucha constitucional librada por la oposición venezolana. No sé si alguien ha podido explicarle a este aventurado el significado del término referendo revocatorio que es a lo que la inequívoca mayoría aspira. Por cierto que los opinadores vinculados al oficialismo se ufanan de la paternidad del revocatorio con un sentido delirante de franquicia. Que se sepa nuestra actual constitución no es de la propiedad exclusiva del MVR o su hijo pródigo, el PSUV. Es a secas de todos los venezolanos.
El único diálogo posible es el del revocatorio porque allí sí que opinará sin galimatías el pueblo venezolano. Si de consciencia hablamos y no me cabe la menor duda de que la hay en el chavismo, debe ser la de entender la hora menguada y el peligroso disparate que vivimos. Con dejar que se imponga la voluntad pacífica de transformación del revocatorio, el presidente Nicolás Maduro podrá demostrarle a la historia que tuvo la grandeza suficiente para confirmar una vocación democrática que encarnó. En cuanto a usted don José Luis: zapatee para otro lado. No sé cuándo será su vuelo de regreso pero le aconsejo que adquiera conservas de guayaba en el aeropuerto para endulzar el fracaso inmenso de su brevísimo rol como mediador.
@kkrispin