Si bien prescindir de la alimentación saludable y del ejercicio no es opción, en tu arsenal para perder peso cuentas con una arma que además de infalible, no requiere de mucho esfuerzo para ayudarte a reducir medidas: son tus hábitos nocturnos, reseña Salud180.
Para empezar, cuando decides irte temprano a la cama, tu cuerpo empieza a disminuir sus niveles de grelina (hormona asociada al apetito), por lo que experimentas menos hambre; este efecto puede perdurar a lo largo del día siguiente, revela la International Journal of Obesity.
Toma una ducha antes de acostarte
El segundo hábito que te hará lograr una cintura de “avispa” es el bañarte por la noche; induce al cuerpo a un proceso de enfriamiento que lo lleva a quemar más rápido la grasa parda, puedes eliminar hasta 275 calorías por tres horas.
La hora del téMás allá de la costumbre heredada de las abuelas, los tés relajantes como la manzanilla, menta y lavanda tienen un efecto mágico sobre el cuerpo; aceleran el metabolismo además de inhibir el hambre.
Nada de chicle por la noche
Estudios muestran que el sorbitol, un alcohol de azúcar presente en la mayoría de las gomas de mascar, es difícil de digerir lo que equivale a que te inflames y parezcas hinchada todo el tiempo.
Taza de café
Si suena extraño, pero es muy efectivo si lo ingieres antes de las 6 de la tarde. Esta bebida, de acuerdo al nutricionista Amy Shapiro, incrementa el metabolismo, además hace que las calorías de la cena se transformen en energía (para las diversas funciones del cuerpo) en vez de almacenarse.
Por último ingiere un vaso de agua antes de irte a dormir y otro al despertar; además de limpiar tu organismo de toxinas, facilitará el tránsito digestivo con lo que evitarás la inflamación. ¡Compruébalo!