El Gobierno persiste en su terco empeño en evitar una consulta popular que es democrática, que es constitucional y que además es racional en medio del deterioro del país y sobre todo de la ingobernabilidad que se percibe en Venezuela. Con este modelo sólo se profundizará el fracaso y los padecimientos del pueblo.
El revocatorio es y será siempre una válvula de escape a la crisis y de soluciones a los problemas. El pueblo quiere decidir sobre el cambio de rumbo que necesita la patria, pero un grupito de ambiciosos persiste en su idea de permanecer en el poder cueste lo que cueste. No les importa el sufrimiento de la gente.
Ante tanta maniobra y burla del Gobierno desde la Mesa de la Unidad Democrática, como coalición que representa el sentimiento de cambio del país, se convocó a la gran toma de Caracas para el 1ro de septiembre, con el fin de presionar para que se active el revocatorio. Tenemos que exigir que se cumpla con la Constitución.
La toma de Caracas no se trata de un golpe de Estado, sino de una manifestación cívica que reunirá a todo el país en el epicentro del poder nacional. No queremos violencia, pero tampoco represión. Queremos demostrar que somos la mayoría y que esa mayoría se cansó de un modelo y de unos personajes que nos han traído a esta tragedia.
Si usted quiere cambio, participe en la Toma de Caracas. No se trata sólo de la construcción de una transición hacia un sistema mucho más eficiente, honesto y respetuoso de la ley. También se trata de recuperar la institucional y garantizar la existencia de la República.
El cambio que la mayoría desea no llegará solo. Tampoco se trata de un problema exclusivo de los partidos. Esa es una lucha ciudadana que obliga a la participación de todos. Que nadie se quede en sus casas. Todos a la toma de Caracas para demostrar que la mayoría desea un cambio. Esta es una oportunidad que no podemos perder.
@PabloPerezOf