La Patria ha sido rodeada por enemigos. Todos quieren que el fruto Maduro caiga de platanote para montar a sus amigotes no regulados. Los animales del Río Guaire huyen despavoridos. Presienten que viene un terremoto. El Cauchicamo se encueva como cualquier soplón en los laberintos del Witness Protection Program. Las Ligartijas sueltan los rabos por doquier. Es una costumbre roja rojita. El Pupúdrilo llora desconsolado viendo a foto de Jacqueline bañándose en su pozo. Ya no le interesa Mercedes que se asolea en las orillas del río. Todo es caos y desorden. Hasta el Hulefante y el Resorteronte del Zoológico se esconden. Viene un vainero. Se reagrupan nuestros bastillones de soldados. No por escuadras, no por divisiones, sino por hectáreas cuadradas. Verduzuela es una gran hacienda cuidada por 18 Samuráis Agropecuarios. Uno por renglón alimenticio básico y regulado. Es una estrategia her-vívora destinada a regar de veneno las tripas invasoras. Se constituyeron como saben 18 grupos para la guerra de la cuarta digestión. Una guerra librada en cuatro fases: Panza, retículo, libro y cuajar. Cada uno de esos 18 ejércitos comandados por un General o un Almirante o una Generala o una Almiranta. Son los Samuráis de la Verdoplaga. Se adoptan nombres ficticios. Para salvaguardar a los almorzantes. El General del Aceite Comestible se llamará de ahora en adelante “El Engrasador”. Todo el mundo sabe que engrasando asuntos las cosas se facilitan. Pedevelsa y Cevegelsa son sus principales recursos ar-mamanticios. El Almirante del Arroz será conocido como “El Arrocero”. Se colea en todas las fiestas cuando no se dedica a robar cantinas militares. Disimula su ordinariez con corbatas Luís Vuitton y trajes de Armani. En materia de Atún encontramos al General “El Pez que Fuma”. Infiltrado en todos los bares y prostíbulos del Caribe y hasta en Dubai, aunque a veces tiene graves problemas con sus yates que se empeñan en encallar en las playas de la Guaira, siempre evadiendo multitudes que lo salvan de morir en los brazos de Neptuno. No hay botella que resista sus embates y certera puntería. Para el control del Azúcar tenemos al regio hombre de armas “Cachucha Dulce” que siempre anda acompañado de dos soldados apuestos, atléticos y muy serviciales. No se admiten pensamientos vulgares ni comentarios homofóbicos. Para el cuido del Café nada menos que mi General “Fuma de América” especialista en el movimiento de sustancias de aquellas perseguidas por la DEA. Capaz de meter 600 kilos de Talco Mammen en la línea aérea más franchuta del mundo. Es el Rey de los Soles. El Único. El Mejor. En materia de Caraotas Negras explota el gran dirigente “Pepa de Zamuro” que estuvo en todos los cargos de MisiaFlores. En la Guardia de Horror. En la Misión Roba-Suela. En el Plan Barro Adentro. ¿Y qué para la Carne de Res? Allí brilla “El Parrillero Revolucionario”. Quien se quemó el pecho con las llamas del carbón, como Gran Patriota, haciéndole parrillas a los enchufados. Con un Dón-de Mando digno de Napoleón. Basta con decirle el número de cuenta bancaria, el banco y el país y el atrincherado Dón-de Mando hace llegar las comisiones en materia de minutos. Para la Harina de Trigo hizo falta diseñar una emboscada con “Cucaracha de Panadería”. Cuya característica es que pone la torta en cualquier sitio en que aparezca. Se le pudren los alimentos importados. Se le vencen las medicinas. En cuanto a la leche la Patria celebra la designación del jefe de blindados “Mala-Leche”, aunque la mala leche es para los venezolanos que sufren las penurias de sus errores y disparates. Es compadre del Psiquiatra Demente de la Capital. Para la harina PAN de Lorenzo Mendoza tenemos al “Arepúo”. Confisca camiones de harina de maíz. Cierra establecimientos. Anda empistolado todo el tiempo. Demanda a quien lo critica. Cierra fronteras y regula precios. Más allá está la Jefa “La Mantequilla”. Diosa de la Amarga-rina. Venida del MAR de la felicidad. Ha sido de todo o de toda. Tiene 17 años enchufada y le quedan por lo menos 5 más si no es que regresa al Gavenete. (Sitio donde cada ministro tiene una gaveta para recibir mordidas, comisiones, prebendas, coimas, rentas, regalos y demás vainas) El estratega archiconocido como el “Guerrero de la Mortadela Popular” luce sus condecoraciones ganadas matando cochinos y verracos con sus propias manos y ordeñando presupuestos. Tiene sus soles bien puestos. Del “Pollo” ¡ay! del Pollo todo el mundo sabe a qué se dedica y quienes lo persiguen. Es uno de los principales estrategas contra el Amperio y la Perra Económica. No le gusta mucho ni Aruba ni Curazao. Cuando anda con el jefazo “Mayonesa Light” son invencibles. Tal para cual. El “Lancero Pastuso” se encarga del control de la pasta, del billete. Flaco como un espagueti. Todo lo vuelve un pasticho. Anda por allí también el patrullero “Polvo de Lavar” que agarra expedientes y los lava. Dinero sucio y lo lava. Acusaciones y las lava. Billete del marco-trágico y los lava. Experto en esconder investigaciones internacionales y en culpabilizar a otros. La “Sardina Guavinosa” es también una Admiranta a todo trapo. Vende y compra patrulleras españolas como quien negocia casabe y naiboas. Y finalmente el táctico en combate bautizado como “Come Frutos”. Se encarga de todo tipo de alimentos frutáceos. Los frutos del odio. Los frutos de la ira. (Estilo Steinbeck) Los frutos del fracaso. Los frutos de la división. Son ácidos pero frutos al fin. Con esos 18 Generales y Almirantes tenemos todo resuelto. Es muy simple la orden que le imparte Goodfather. A todo lo que se mueva le disparan y lo convierten en vegetal, a todo lo que no se mueva lo pintan de verde y lo convierten en vegetal. Doble timón y un ancla. Seguiremos informando desde el centro de la Batalla de todas las Batallas. El triunfo está asegurado. Nadie puede agarrar esa papa caliente. Se aprueba el siguiente himno que será cantado todos los días al salir y al ponerse el sol. Al dólar debemos solícito amor. Jamás olvidemos que obra de amor. El dólar da sombra como PDVSA, y pone el billete en tu propia mesa. Sus comisiones frondosas aquí extenderá y aviones y yates a ellos darán.
Eduardo Semtei Alvarado @eduardo_semtei