Un año atrás, Maduro, el gobierno y la cúpula del Psuv hicieron muchas cosas para tratar de causar una gran crisis política a fin de encontrar una causa y una excusa para suspender las elecciones parlamentarias porque ya las encuestas les decían que las perderían. ¿Lo olvidamos?. Desde poner al CNE a esconder la fecha por meses, quizás en la esperanza de provocar una respuesta con violencia, hasta -una de las mas importantes- el cierre de la frontera con Colombia marcada con sus actos brutales de tropelías vergonzosamente inhumanas. ¿Esperaban una respuesta destemplada del gobierno de Colombia para alimentar un clima patriotero y hasta semi bélico que justificara “por la patria agredida” suspender las parlamentarias?. A la postre, como sabemos, fracasaron. Nadie les siguió el juego y la brutalidad de marcar casas muy humildes y demolerlas, atropellar a miles de personas y ahogar mucho mas a la Venezuela fronteriza, fue otro elemento que se acumuló, además del desastre económico y social, la mega corrupción roja y los atropellos, para que el pueblo venezolano los derrotara con 8 millones de votos que eligieron a 112 diputados contra un “escuálido” grupo de un poquito mas de 50 oficialistas. La maniobra indigna no les sirvió de nada y, por el contrario, se les revirtió.
Una abrumadora mayoría del pueblo venezolano junto a la Unidad Democrática los castigó por arruinadores y corruptos y al mismo tiempo apoyó el inicio del cambio democrático expresado en una nueva AN, radicalmente distinta a aquella AN genuflexa, inútil, arrodillada a los designios del poder, sorda y burlona, divorciada de los problemas del país, clausurada para la prensa libre y para los gremios, sindicatos, universidades y las regiones. Aquella que se negaba a debatir los problemas del país y engavetaba las denuncias de corrupción.
La MUD, sus candidatos, cientos de miles de activistas organizados y ese pueblo mayoritario debieron vencer todos los obstáculos y ventajismos del poder en la campaña electoral. Fue mucho, muchísimo mas que la MUD vs el Psuv. Fue la MUD, su acertada conducción política unitaria, con su hoja de ruta y su estrategia inequívocamente democrática, con la firmeza del pueblo derrotando al gobierno corrupto que usaba sin pudor los dineros públicos, en cientos y miles de millones, derrotando también al CNE que no solo permitía y avalaba los ventajismos sino que inventó aquello de la tarjeta engañosa al lado; que junto al TSJ liquidó partidos tratando de inhabilitar a la MUD. CNE y TSJ confabulados que habilitaron partidos fantasmas para competir en formas truculenta con la Unidad y en paralelo para quitarle rivales que eran legítimos al Psuv (¿o ya olvidamos lo que sucedió con PPT, Podemos, MEP y Marea Socialista?). Por si fuera poco, el pueblo organizado y la MUD derrotaron al cerco de silencio y censura, desinformación y contrainformación del latifundio (cientos) de medios controlados por el gobierno además de las infames y abusivas “cadenas”.
Un detalle adicional es que la Venezuela que lucha por el cambio también debió superar la infame campañita de los mini-grupitos (inexistentes en el país real organizado, pero fanáticamente activos en las redes sociales con muchos “robots” y cuentas anónimas con disfraz) cuya razón de ser obsesiva no es tanto oponerse al régimen sino tratar de destruir a la alternativa democrática. Que llamaban a no votar y “salvar el voto”, porque, “todo está arreglado, las maquinas cambian los votos y Fidel cambia los resultados”. Aseguraban que “la MUD es colaboracionista y tiene un pacto secreto de aceptar el fraude a cambio de unos puesticos de diputados”. El 7D no dieron explicaciones de sus pronósticos y “verdades” falsas y mucho menos pidieron perdón por tanta campaña dañina.
La guerra sicológica y la desesperanza aprendida
El gobierno tiene una Sala Situacional que incluye un “grupo de Alto Mando estratégico” que se dedica a diseñar las campañas de terrorismo de estado, las campañas de “culpar a otros” (el imperio, la guerra económica, la oposición, etc) de sus propios desastres, las campañas de distracción para tratar de tapar los problemas reales, Las campañas de “golpe de estado y magnicidios” para tratar de criminalizar a los que piensan distinto, a los que luchan y a lanueva mayoría que es la oposición democrática. También, con asesoramiento extranjero, diseñan las campañas de “guerra sicológica” para tratar de sembrar desaliento, derrotismo e inducir a la desesperanza. Cada vez que escuchamos a á un jerarca corrupto rojo decir tajante: “no habrá revocatorio”, (y casi agregan “porque no nos da la gana”, lo cual queda sugerido) igual que hace un año decían “ganaremos las parlamentarias COMO SEA”, estaban siguiendo un guión de su “plan estratégico”: el de sembrar derrotismo y desesperanza. Claro que eso calza con su talante antidemocrático, es decir, lo dicen con gusto y deleite. Ese tipo de discurso abusivo viene bien a su militarismo ramplón y convicciones totalitarias aunque también a sus miedos por perder el poder impune y la corrupción sin límites. Pero eso viene en los manuales de la Sala Situacional: sembrar e inducir desesperanza.
Venezuela les impondrá el RR y el cambio
Cada vez lo logran menos, pero aún alguna gente es víctima de esa campaña constante de guerra sicológica. Cuando usted, amigo (a) lector (a), dice, por ejemplo: “esos tipos nunca permitirán que se les gane una elección”, quizás trata de reflejar una verdad sobre el talante antidemocrático de la cúpula corrupta roja, pero reproduce algo del desaliento que ellos tratan de sembrar. Lo correcto es esto: “esos tipos usan todas las trampas y tropelías para tratar de impedir que Venezuela les gane con votos y comience el cambio, pero no podrán lograrlo. El pueblo los derrotará. El pueblo, luchando con firmeza e inteligencia, sin salir de la ruta democrática, pese a las provocaciones y tropelías, superará todas sus trampas y habrá RR. Habrán millones de firmas y muchos mas millones de votos. Habrá un triunfo clamoroso y abrumador de la Venezuela del progreso, democrática y del cambio aún mas grande del que hubo el 6D cuando también decían que ganarían COMO SEA y no pudieron. Luchando, presionando, participando, superando la represión y los abusos Venezuela se impondrá”.
El #1S, #VillaRosa, el #7S y mas
Gigantesco y clamoroso el triunfo de la Venezuela democrática el #1S. Fue descomunal la movilización popular para “la Toma de Caracas”. Hemos visto informes meticulosos que miden, con métodos científicos, 960 mil personas. Otros, mas conservadores, indican 820 mil. La MUD -y no les falta razón- advierten que hay que sumar la gente en calles adyacentes y la que quedó varada en alcabalas y trancas, por lo que la cifra se eleva sobre el millón 100 mil. Cualquiera de ellas es señal de un triunfo gigantesco. Mas si lo comparas con la “escuálida” concentración oficialista de la Av Bolívar pese a tantos autobuses, amenazas, presiones y recursos de la nación mal usados. Pero sobre todo porque esa multitud nunca vista, acudió a la convocatoria de la MUD superando días y días de campañas de terrorismo de estado. Ministros, medios gobierneros y funcionarios tratando de sembrar terror hablando de “golpe de estado, planes de asesinato”, etc. Uno de los objetivos de esa campaña del “golpe de estado” era meter miedo y que mucha gente se quedara en su casa. A ver si lograban que la “Toma” fuese débil. El otro objetivo era crear una “justificación” (¿?) para las tropelías, los abusos, la represión. Un tercer objetivo era, por ridículo que parezca auto festejarse por “derrotar el golpe”. Como dijo una publicación humorística: “el gobierno inventa un golpe de estado y luego se felicita por haberlo derrotado”.
La Toma de Caracas, con ese millón de participantes y muchas decenas de miles en otras ciudades (como en Puerto Ordaz donde se reunió un multitud impresionante) fueron la muestra de la determinación de lucha de Venezuela y su pueblo exigiendo que el CNE no siga obstaculizando el derecho constitucional y pacífico; democrático, del referéndum revocatorio. Triunfo colosal derrotando no solo las campañas de terrorismo de estado, sino las abusivas trancas y bloqueos en docenas de carreteras y autopistas; la confiscación y trabas a medios de transporte; el uso indigno de militares y policías a quienes se obligaba a trancar y abusar (por cierto abundaron los testimonios en esas alcabalas de bloqueo, de militares mostrando su disgusto por lo que les ordenaban hacer y simpatizando discretamente con los manifestantes).
El inesperado episodio de Villa Rosa, en Margarita con la espontánea y fenomenal “caceroleada” que le dieron a Maduro mostró en otro plano lo que ya sentenció el #1S: el gobierno está cada vez mas menguado y escuálido de apoyo popular. Las convocatorias oficialistas en los días subsiguientes han resultado muy, pero muy, pobres. El descontento del antiguo chavismo es ya inocultable. Igual pasó con la convocatoria del #7S en las regiones.
¿Cuántos van a hundirse con la cúpula corrupta tóxica?
Cada vez mas signos de incomodidad y hasta rebeldía en el gobierno, el Psuv y las instituciones. Nose trata de que se conviertan en “opositores” ni de la MUD. No. Es diferente. Cada vez mas oficialistas entienden que el futuro político del otrora chavismo -adopte el nombre que sea- pasa por no seguir cometiendo tropelías. Y que mas bien podrían ganar mas, aún perdiendo en un revocatorio, que tratando de impedirlo a la fuerza y con abusos. Reconstruir su opción política para el futuro pasa por una actitud democrática deslindándose de los grandes corruptos y de los abusadores totalitarios. Yo imagino la Venezuela democrática del futuro próximo como una en la cual habrá una o varias fuerzas políticas de lo que fue el chavismo, actuando en la legalidad pluralista y democrática. Esa cúpula podrida presiona a los antiguos simpatizantes del chavismo y les habla de “defender la revolución”. ¿Cual revolución?. Esa cúpula podrida solo piensa en su corrupción impune y en esa idea equivocada de cierta izquierda con obsesión totalitaria de que ellos son “para siempre”. Lo mismo que decía Hitler de su “Reich para mil años”. O Stalin y Mao de su “revolución eterna”.
El cambio va!. Está venciendo. Venezuela y su pueblo lo impondrán