Más de un centenar de payasos se congregaron hoy en la Sexta Avenida del Centro Histórico de Guatemala para reivindicar el respeto a una profesión infravalorada.
EFE
Asidos a una perenne y enorme sonrisa, unos 150 payasos recorrieron este lunes en procesión el Paseo de La Sexta, la calle peatonal más emblemática de la capital, para luego celebrar en un hotel una capacitación para los que dan sus primeros pasos “en este bello arte”.
Así lo explicó a Efe uno de estos hombres de cara pintada, Carlos “Chispa”, quien aseguró que esta tercera convivencia “de payasos urbanos unidos de Guatemala” se prolongará hasta el próximo jueves.
Uno de los fines, dijo, es pedir “que el arte del payaso sea respetado”, una meta por la que también trabaja la Asociación de Payasos y Cómicos de Guatemala (APCG), que tiene en sus filas a payasos de varios puntos del país, donde se capacitan, se forman y se ayudan como gremio.
Guatemala, a pesar de ser uno de los países más violentos del mundo y también uno donde la pobreza y las desigualdades campan a sus anchas, acogió hoy una jornada de risas, que los transeúntes no dudaron en agradecer.
Precisamente uno de los que se dejó ver por la Sexta Avenida fue Sammy Morales, el hermano del presidente de Guatemala, Jimmy Morales, quien supuestamente está siendo investigado por su participación en un caso de corrupción, pero que acaparó las miradas de la ciudadanía, que no dudó en fotografiarse con él.
Sammy tiene un programa de televisión, en el que participó antes de ser presidente el propio Morales, donde bajo el título de “Moralejas” provocaban las risas de los guatemaltecos.