El Deportivo Alavés cortó una racha de cuatro jornadas sin ganar al derrotar a Osasuna en El Sadar en un partido de mejor fútbol visitante, pero con ocasiones repartidas, aunque el cuadro vitoriano se llevó los tres puntos con un gol del venezolano Christian Santos de penalti (0-1), reseñó EFE.
De esta forma, Osasuna sigue sin ganar en casa en la presente temporada y no escapa de la zona de descenso, mientras que el Alavés respira tranquilidad al vencer al conjunto navarro en Primera después de catorce años.
El partido, de gran rivalidad aunque con las aficiones hermanadas, comenzó con polémica, por jugadas en ambas áreas, sin que se moviera el marcador.
A los tres minutos Toquero, a pase de Theo, enganchó un remate que Nauzet sacó al límite de la línea de gol, aunque el jugador alavés reclamó que el balón había entrado. Nueve minutos después el conjunto local pidió penalti por una entrada de Theo a Oier.
El Alavés fue mejor en juego y posicionamiento sobre el campo en la primera parte, aunque las ocasiones de gol estuvieron a la par, con un Osasuna que dio sensación de estar demasiado partido en sus líneas.
El conjunto del argentino Mauricio Pellegrino, que no pudo sentarse en el banquillo al estar sancionado, marcó el ritmo del partido ante un Osasuna demasiado atrás y entregado a sorprender a la contra.
Los visitantes pudieron desnivelar el marcador en el primer periodo en un par de remates de Dani Torres y Santos, mientras que el equipo navarro llevó peligro en una internada de De las Cuevas, abortada por Feddal, y sobre todo en un remate de Sergio León, tras un córner de Roberto Torres, que sacó bajo la portería Toquero.
La segunda parte fue de guión similar, aunque Osasuna salió con intención de aguantar un poco más el balón y fabricó con rapidez una buena ocasión, pero Pacheco sacó el disparo de volea de Kenan Kodro.
El equipo vitoriano fue madurando el partido a ritmo lento, sin prisa, y encontró el premio a su paciencia en una pérdida de Oier, aprovechada por Theo para internarse hacia el área rival, donde sobre la misma línea fue derribado por David García.
El venezolano Christian Santos ejecutó el penalti con maestría a falta de un cuarto de hora para la finalización del partido, sin que Osasuna pudiera reaccionar, aunque reclamó un penalti por una acción de Feddal con Oier.