El pasado 31 de octubre, la viceministra de la Suprema Felicidad, Carolina Cestari, convocó a todo el personal que labora en el Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela, entre ellos directores de núcleos, empleados administrativos y músicos, para intentar “lavarles” el cerebro con su paupérrima ideología que nos tiene en este atolladero.
Cestari amenazó a los empleados que no se sienten chavistas y los invitó a buscar trabajo en otro lugar. “¿Usted no está de acuerdo con el proceso revolucionario? Sea coherente con su posición política y busque trabajo en otro lado”.
Carolina Cestari fue asistente en la Asamblea Nacional de Cilia Flores y productora del programa “La Hojilla”; el mismo Mario Silva la calificó de “mala persona”.
Actualmente, además de ser viceministra de la Suprema Felicidad, es directora de la Fundación Nacional Niño Simón. La puedes recordar por haber desalojado a una joven madre de una vivienda en el complejo habitacional de Ciudad Tiuna por simplemente haberle caceroleado al gobierno de Maduro, o cuando en el año 2014 agredió con unos palos a un grupo de opositores.
