Zamora es uno de los 18 municipios que conforman el estado Aragua, y me atrevería a decir que junto a Sucre, son las regiones más golpeadas por la dizque revolución, y es que pasaron de ser punto de referencia del desarrollo y del emprendimiento, orgullo de los aragüeños, a poblaciones olvidadas, arruinadas y con un sinfín de carencias que hunden a sus pueblos en la tristeza, la desolación y en el éxodo, porque es cuesta arriba soportar esta condena a la que han sometido a los zamoranos.
Zamora ha tenido la desgracia así como muchos municipios del país, de haber caído en la trampa del oficialismo, y ha contado con alcaldes exportados y sin ningún aprecio ni respeto por el pueblo, y en función de ello, han actuado de manera irresponsable y no han sabido llevar a cabo políticas municipales para enaltecer a sus municipios, todo lo contrario, se han dedicado a beneficiarse ellos y sus allegados, y el resto, que se hunda en la miseria y en la desolación.
Inseguridad, desempleo, servicios públicos pésimos, calles y aceras deterioradas, carencia de alumbrado público y desabastecimiento, son algunos de los graves problemas con los que a diario conviven los zamoranos, sin que se vea la voluntad política para cambiarle el rostro a Zamora. No obstante, la calidad de vida ha mermado en demasía, y hoy observamos casas muertas, utilizando el título de la novela de Miguel Otero Sillva. Es decir, en cada calle, avenida, barriada y urbanización, se siente el paso inclemente de la revolución.
Su actual alcalde Michael Reyes, quien por cierto al quedar electo se mudo al municipio Sucre, no es conocido como un político connotado o un luchador social, para vergüenza de los zamoranos, es conocido por haber golpeado salvajamente a un diputado de la Asamblea Nacional dentro del Hemiciclo. Entonces, con un curriculum tan mediocre, no podíamos esperar algo diferente, porque zapatero a su zapato y el actual estado de abandono de Zamora, habla solo y no se requiere mayor profundización.
El pueblo zamorano ha sido burlado por la revolución, porque los sometieron a una involución histórica que le ha hecho un daño prácticamente irreversible. Hoy Zamora es reconocido a nivel nacional como uno de los municipios más inseguros del país. A diario se cometen delitos de toda índole y como siempre, el manto de la impunidad priva, lo que aterra a la población y los coloca en estado de sitio prácticamente porque a partir de las 6 de las tarde, las calles quedan solas y desiertas, porque la gente se encierra en sus viviendas para tratar de blindarse contra la inseguridad.
Zamora tiene una extensión de 649 kilómetros cuadrados, y es muy lamentable y calamitoso ver la desidia en la que está sumergido, todo a su paso es oscuro y gris, mientras la revolución roja rotina disfruta de las mieles de su engaño y de su farsa, mientras un pueblo humilde y noble pasa penurias y muchas carencias.
No todo está pérdido, y el cambio vendrá a Zamora más temprano que tarde, con gobiernos municipales demócratas y comprometidos con su pueblo y con sus necesidades más sentidas. Es un compromiso de vida que asumimos quienes nos duele nuestro estado Aragua, y muy pronto habrá un nuevo amanecer para nuestro querido Zamora. Seguimos luchando por un presente y un futuro digno, y junto a nuestro pueblo lo vamos a lograr.
Clever Lara
Secretario de Organización
Acción Democrática Aragua
@cleverlaraad