El retiro de 6 mil millones de billetes de Bs. 100, que representan el 47,55% del total de billetes que están circulando en el país, ¿será una simple barrabasada de Nicolás? Sería una estrategia para desviar la atención del colapso económico y político, con un objetivo aparente, aniquilar el dólar negro. Ese canje criminalizó el uso del billete más usado, en diciembre, cuando el flujo de efectivo es muy alto, constituye una enmascarada y engañosa restricción de la libre disposición del dinero. De ahí a la estatización de la banca hay sólo un paso. Ese retiro de billetes y cierre de frontera presagia nuevo caos en Venezuela, se inició en Martes 13, que como el Viernes 13 anunciado para retomar el diálogo, es una fecha pavosa.
Sacar de circulación el billete de 100 Bs. en 72 horas, sin tener aún los nuevos billetes, debería ser argumento suficiente para declarar a Maduro loco. Si eso fuera poco, ahí tienen como pateó un compromiso adquirido ante el enviado del Papa, desechando la escogencia conjunta de los rectores del CNE. Un golpe a la democracia por el cual los protagonistas del diálogo deberían renunciar y el enviando papal irse a flagelar por incauto. Posiblemente lo estén pensando, así como pensaron bastante declarar la responsabilidad política de Nicolás Maduro en la crisis nacional, a la par del caos del papel moneda sin valor, para muchos una estrategia de confrontación que conduciría a un Pacto de Gobernalidad hasta el 2018 por el PSUV-AD-UNT.
En esto no hay casualidad, caos, confrontación, se inducen para tapar el escándalo que se avecina con ese pacto. De no ser así, el siguiente paso del poder más legítimo es declarar el abandono del cargo, antes del 10 de enero, eso incluye retomar la agenda de calle. Basta de lamentos, si tememos el único parlamento que no controla al Presidente de la República, es por ganar la Asamblea Nacional, con 112 diputados, y no cumplir la agenda prometida: designar 5 rectores del CNE, a magistrados del TSJ, al Fiscal General, Defensor del Pueblo y Contralor, liberar a los presos políticos y sacar a Maduro en 6 meses. Votamos por eso. No lo hicieron y la dictadura avanzó, más con la payasada del diálogo, dándose el tupé de incrementar el número de presos políticos, ratificar y juramentar a rectores chavistas del CNE, según la Presidenta del TSJ porque en la AN se las “echaron al hombro” con esos nombramientos. No le faltaría razón a Gladys María, a la sesión convocada con ese fin llegaron tarde, por no decir que faltaron. Entonces, sería verdad que ese nombramiento por parte del Poder Judicial se acordó en el diálogo.
Los ánimos aparentemente están caldeados, como para meternos con vaselina un pacto de gobernabilidad o cualquier otra marramucia, adquiriendo connotaciones kafkianas llevar la Declaratoria de Responsabilidad de Nicolás al Poder Moral, como el hecho que para el próximo año no se tenga claridad de algún proceso electoral. No es que en la MUD se opongan mentalmente a aceptar que existe una dictadura, sino que en su seno se benefician de su prolongación en el tiempo, prestándose como tontos útiles para consolidar la percepción de la continuidad del narcoestado como algo irremediable.
@jolcesal