En nuestro artículo de la semana pasada advertimos que la transición del cono monetario en Venezuela se estaba realizando bruscamente y que en el afán de la dictadura por recoger la impresión exagerada de billetes de 100 Bs. que circulaban sin su respaldo en oro, los únicos afectados serían los ciudadanos, quienes contaban con 72 horas para realizar el canje de los más de 11 mil millones de billetes de 100 Bs existentes en nuestro territorio.
Por Aarón Rodríguez Moro – @RodriguezAaron
El poco tiempo con el que fue anunciada la medida no permitió a las entidades bancarias tomar medidas para poder satisfacer a la gran cantidad de personas que empezaron a acudir a sus sedes, y a pesar de que muchos bancos trabajaron en horarios extendidos las 72 horas se desvanecieron muy rápido.
Los billetes de 100 dejaron de ser recibidos rápidamente en establecimientos comerciales, los de 50 Bs. no se dan abasto para poder compensar la ausencia de su hermano mayor, sumado a que nunca llegaron los nuevos billetes del cono monetario anunciados por Maduro fueron la suma perfecta para el caos y el desespero reinaran en nuestro país.
Los puntos de ventas están colapsados desde hace tiempo, pero estos días sus fallas se elevaron a la máxima potencia, sin importar el banco emisor, todas las tarjetas de débito debían deslizarse al menos 2 veces para que pasaran por los puntos, en los banco no había efectivo e incluso hubo denuncias de que los cajeros automáticos seguían dispensado billetes de 100 Bs. durante estos días.
Todas estas acciones llenaron de desespero a los venezolanos, quienes se sentían robados por el gobierno, pues a pesar de tener dinero en sus cuentas bancarias, eran incapaces de usarlo. Fue tal la impotencia, que se empezaron a desarrollar olas de saqueos en distintas ciudades de Venezuela, La Fría, San Félix, Santa Bárbara del Zulia, Maracaibo, El Callao, Tumeremo, Maturín, Santa Elena de Uairén y con más fuerza en Ciudad Bolívar.
En la ciudad del Orinoco saquearon más de 350 locales comerciales y destrozaron 90% de los locales que venden alimentos, e incluso algunas casas también fueron víctimas de estas hordas, todo sucedió ante la mirada silenciosa de los medios tradicionales, pues los reportes de estas eventualidades sólo se hicieron públicas a través de las redes sociales y algunos medios digitales.
Ahora Maduro culpa a la CIA, la Guerra Económica, la oligarquía y hasta a la iguana come cable por el atraso en la llegada de los nuevos billetes, aunque todos sabemos que es él el único responsable del caos que reinó en Venezuela esos días. Ahora anunció que los billetes de 100 seguirán en circulación hasta el 2 de enero, aunque en realidad será hasta el viernes 30 porque el 2 es feriado bancario. Y a pesar de que ya han hecho el anuncio del arribo de poco más de 13 millones de billetes de 500 Bs. cantidad que no alcanza ni para dar un billete a cada venezolano, aún siguen sin aparecer en circulación, y de no existir cambios, parece que la historia se volverá a repetir en enero, con los mismos resultados.
A pesar de que se vislumbran días muy oscuros para Venezuela, no podemos dejar que la desesperanza triunfe en nuestros corazones, debemos llenarnos de fuerza, fe y optimismo porque siempre se hace más oscuro justo antes del amanecer y ya estamos muy cerca de presenciar el nuevo amanecer de nuestro país.
Aarón Rodríguez Moro – @RodriguezAaron