Alvaro Valderrama Erazo: ¡Feliz Navidad!

Alvaro Valderrama Erazo: ¡Feliz Navidad!

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Hoy ha nacido en Belén de Judea el Mesías, el Señor!

En el pesebre lo acompañan la virgen María y su esposo, San José.





Inspirados por las palabras del Ángel de Dios, son los pastores que cuidan de los rebaños de la comarca los primeros en ir a visitarlo.

Ante el anuncio del Ángel de Dios se ponen los humildes pastores en camino, guiados por la fe y por la alegría de la primicia: „Hoy os ha nacido el Salvador, el Mesías, el Señor“

El lugar al que se dirigen es la pequeña „Belén de Judea,.“ En aquella pequeña ciudad había nacido y había sido ungido David como rey de Israel. De allí el nombre „La ciudad de David“.

Nos enseña el primer capítulo del Evangelio de San Juan que Cristo es Dios, que Él es La Palabra que habita entre nosotros y que Él es la Luz que brilla en las tinieblas“. Por su parte, acentúa el Evangelio de San Lucas la humildad de su nacimiento y la de aquellos a quienes Dios hace partícipes y testigos de ese misterio divino que se humaniza.

El Santo Evangelio según san Lúcas nos muestra hoy -y muy especialmente a nosotros, los cristianos de estos años difíciles de la historia viva venezolana- el misterio del nacimiento de Jesucristo, el Redentor de la humanidad.

Precisamente por éstas fechas decembrinas hacemos presente su venida, representada en la tradicion familiar de nuestros pesebres navideños, llenos de religiosidad, cultura y encanto popular.

Lo que impresiona de la concordancia bíblica entre ambos textos evangélicos -de San Juan y San Lucas- es la humildad de Dios, que asume nuestra naturaleza humana naciendo en un establo y la humildad y fe de aquellos pastores que se hacen partícipes de la obra salvífica de Dios en Belén de Judea.

Los signos que rondan el nacimiento del Redentor anunciados por el Ángel son creídos con fe por los pastores: „Encontraréis al niño, envuelto en pañales y acostado en un pesebre“.

Para muchos poderosos de éste mundo sería un tánto difícil creer que un rey, más aún un Rey que es „Dios con nosotros“ pudiera venir al mundo en tales condiciones de sencillez y pobreza.

Son, justamente aquellos pastores, pobres y humildes, aquellos cuidadores de ovejas ajenas, aquellos hombres que trabajaban a sol y agua y a la buena de la naturaleza, los que podrán escuchar el anuncio del nacimiento del Mesías y el júbilo de los coros celestiales.

Son precisamente los pastores quienes escuchan el mensaje divino con una actitud de espera y creyéndolo sin vacilar responden al mismo de forma generosa.

Después de creer la buena noticia escuchada, se disponen los pastores a regresar, dándo gracias y glorificando a Dios, para dar entonces a conocer a viva voz la vivencia de la fe, asumida y puesta en práctica.

Hagamos nosotros lo mismo!

Feliz Navidad!