La Fiscalía de Perú solicitó hoy al Poder Judicial que dicte una orden de prisión preventiva por dieciocho meses contra el expresidente Alejandro Toledo (2001-2006) por presuntamente haber recibido 20 millones de dólares en sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
EFE
A Toledo le imputan los delitos de tráfico de influencias y lavado de activos por haber recibido los sobornos a cambio de favorecer a Odebrecht en la licitación de la carretera interoceánica del sur, que atraviesa el territorio peruano desde la costa del océano Pacífico hasta la frontera con Brasil.
El pedido de prisión preventiva será resuelto en los próximos días por el juez Richard Concepción, titular del Primer Juzgado de la Sala Penal Nacional, quien atiende las medidas solicitadas por la investigación que dirige la Fiscalía.
Entre otras medidas, el juez podría dictaminar un pedido de busca y captura internacional contra Toledo, quien se encontraba en París cuando se conoció su implicación en los sobornos de Odebrecht.
El sábado pasado la Policía allanó la lujosa vivienda que Toledo compró en Lima al poco de abandonar la presidencia y se retiró con numerosos documentos.
El expresidente es la primera gran figura de la política peruana inculpada por haber recibido sobornos de Odebrecht, en un caso que desde hoy también tiene como investigada a la ex primera dama de Perú, Nadine Heredia.
En Perú, Odebrecht pagó 29 millones de dólares en sobornos a funcionarios entre 2005 y 2014, años que comprenden los Gobiernos de Toledo, Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016), según se desprende de un acuerdo firmado por la compañía con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.