Las embarazadas que se dirigen a centro asistenciales públicos como el hospital Luis Razetti de Barcelona en busca de atención médica para dar a luz, requieren un promedio de 300 mil bolívares para asumir el costo de los insumos y exámenes solicitados por los galenos. Así lo reseña eltiempo.com.ve
Por Emely Pérez
Así lo aseguró el secretario ejecutivo del Sindicato de la Salud, Giovanni Yaguaracuto, quien sostuvo que en el recinto capitalino la escasez de insumos cada día es más alarmante.
Ante los altos costos de las clínicas privadas, Juan Antoima llevó a su pareja al hospital para un parto asistido. Mientras estaba en las escaleras que funcionan también como sala de espera, confirmó la denuncia del dirigente sindical.
En un papel en mano que simulaba ser un récipe médico, pues se trataba de una hoja reciclada con un sello del centro asistencial, se hallaba la lista que le fue solicitada para atender a su esposa.
En el papel le pedían cuatro frascos de solución Ringer, cuatro soluciones fisiológica 0.9, ocho pares de guantes y cuatro paquetes de suturas, además del kit quirúrgico para médicos, asistentes y la misma paciente.
“Sólo el kit de batas y gorros me costaron 30 mil cada uno por mercado libre, pues no se consiguen en farmacias”, refirió el joven padre, quien aseguró haber tomado las previsiones de comprar los insumos con tiempo. “Mi hermana pasó por lo mismo a finales del año pasado y ya sabía lo que me esperaba”.
Las suturas se pueden conseguir en 8 mil bolívares cada una y las soluciones entre 3 mil y 5 mil.
En el presupuesto también debían incluirse los exámenes médicos que son solicitados, porque por la falta de reactivos no pudieron ser efectuarse en el hospital.
“También me pidieron la anestesia y otro medicamento que se usa para revertir el efecto”.
Sin nada
Yaguaracuto indicó que en la sala de parto del centro asistencial no hay equipos para la atención de las pacientes.
El dirigente sindical aseguró que pese a que el área fue reinaugurada a finales de diciembre, los recursos que se invirtieron, al parecer, no fueron suficientes, pues no hay insumos que garanticen la atención de los pacientes del Razetti.