“La violencia y el miedo entraron en el ADN de los ciudadanos, porque en Venezuela manda el hampa”, aseguró el coordinador de Gente de Guayana, Wilson Castro, luego de un recorrido casa por casa en Las Parcelas del Roble, parroquia Simón Bolívar, del municipio Caroní.
El dirigente estuvo acompañado por la concejal Dorkis Castro y parte de la militancia de Gente de Guayana, que conversaron con los ciudadanos y llevaron su mensaje de cambio.
“Nos pedía que no entráramos al barrio por el miedo que sientes a los enfrentamientos que se presentan en el sector, pero al final recorrimos la zona y pudimos conversar con los vecinos”.
Castro denunció que en el municipio Caroní se presentaron alrededor de 700 muertes violentas durante el mes de febrero, producto del “hampa que ha tomado el control de la ciudad”.
Indicó que este barrio no es más que un reflejo de lo que ha sucedido en el país, donde la delincuencia ha tomado el control de la cotidianidad, con el amparo del Gobierno.
Instituciones podridas
Alegó que el dominio de la delincuencia de debe a que Venezuela no sólo vive una crisis financiera, sino también institucional, que ha permitido al hampa entrar en todas las organizaciones públicas y manejarlas a su gusto.
“La institucionalidad venezolana está quebrada por el delito, porque los corruptos que están en cargos de Gobierno se apoya en delincuentes comunes para proteger sus intereses y ampliar sus negocios sucios”.
Consideró que una prueba de su argumento son los denuncias por narcotráfico contra altos funcionarios del ejecutivo o las investigaciones por corrupción que se desarrollan en otros países, sin ser tomadas en consideración por las autoridades venezolanas.
“Esto es una evidencia de que las instituciones locales se amparan el delito, en lugar de buscar sanear el Estado”.
Vamos a cambiar
Castro aclaró que esta supremacía del hampa no será permanente: “No somos el primer país que pasa por esto, debemos tener esperanzas porque hay ejemplos muy claros de cómo las naciones lograron librarse de situaciones similares o peores”.
Comentó que el bien siempre va a triunfar sobre el mal, por lo que seguirá difundiendo un mensaje de cambio y esperanza en las comunidades.
“Estamos en las calles para decirle al ciudadano que hay una esperanza de cambio y existe una generación de líderes dispuestos recuperar Venezuela, para que ellos puedan vivir sin miedo”.