Con una cuarta parte de lo que el gobierno ha invertido hasta ahora en importar productos para las cajas Clap, los agricultores venezolanos podrían revertir la caída de la producción y garantizar alimentos para población, que sufre una de las peores crisis de escasez de que se tenga registro.
Así lo dio a conocer Antonio Pestana, presidente de la Confederación de de Asociaciones de Productores Agropecuarios (Fedagro), quien rechazó que el proyecto estatal privilegie a agricultores de otros países mientras a los venezolanos se les niegan los recursos para trabajar.
Según el gobierno, desde que se constituyeron los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap), se han invertido 6.000 millones de dólares en la importación de los productos que distribuye el programa gubernamental; es decir, que solo con solo 1.500 millones de dólares se garantizaría el alimento a los venezolanos.
“Con un tercio de ese monto pondríamos a producir el campo”, dijo Pestana, recalcando que si el año pasado la producción de alimentos apenas alcanzó para cubrir 4 meses de consumo, este año podría ser mucho peor porque no hay insumos para iniciar la temporada de siembra de verano, la más importante del ciclo anual.
Al respecto, dijo que entre las muchas razones por las cuales temen que los venezolanos tengan muchas más dificultades para conseguir insumos esenciales como harina de maíz, arroz, azúcar o vegetales perecederos, es porque no hay ya posibilidades de que sean producidas y distribuidas los 15 millones de kilos de fertilizante que se necesitan para el ciclo que cultivo que debería iniciarse el 1° de mayo.
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