El sociólogo Luis Cedeño, director de la ONG Asociación Civil Paz Activa, sostuvo que el suceso ocurrido en Sabana Grande, en el que fueron asesinados dos sargentos del ejército a manos de un niño de 10 años y de una joven de 15 años de edad, demuestra que cada vez es más común hallar menores de edad involucrados en este tipo de hechos sangrientos, reseña Unión Radio.
“La edad en que comienzan los jóvenes a delinquir es cada vez es menor. Estamos viendo desde hace varios años niños que se integran a las bandas delictivas mucho más temprano, un joven puede estar entrando a una banda a los 9 o 10 años”.
Explicó que estos niños en muchos casos son indigentes. “Debemos incluir en ese grupo de indigentes a niños, jóvenes y adolescentes, los venezolanos estamos viendo que cada día hay mayor indigencia en las calles y en el casos de los niños es porque básicamente sus familias ya no pueden proveer por ellos”.
Al referirse a este nuevo fenómeno social, Cedeño explicó que, al igual que los menores involucrados en el asesinato de los dos militares que pertenecen a la banda denominada Los Cachorros, los niños indigentes que pululan por las calles de la capital y de todo el país se agrupan en una banda para protegerse.
“Probablemente el jefe no supere los 18 años y de ahí para abajo. Suelen ser bandas de entre 15 y 30 muchachos que están tratando de sobrevivir en la calle y la situación grupal les da una suerte de apoyo para vivir algo tan difícil”, lamentó.
Resaltó que los centros públicos para atender a menores de edad abandonados no tienen capacidad de absorber a estos jóvenes y “aunque los cuerpos de seguridad del Estado los recogieran no tendrían donde remitirlos”.