Lapatilla
Una pareja de guacamayas observa desde lo alto de un volado de un edificio la represión de la GNB a una de las manifestaciones pacíficas que ayer se dieron en Caracas. La GNB y la PNB con el lanzamiento indiscriminado de gases lacrimógenos ha afectado seriamente el ambiente de la ciudad, afectando a niños, abuelos, mascotas y vida silvestre en general. El polvillo irritante y potencialmente tóxico queda por días impregnado en hojas, tallos, calles, paredes… y también en el alma de la nación venezolana. (lapatilla.com)