El Arzobispo de Mérida (Venezuela), Cardenal Baltazar Porras, advirtió que el gobierno de Nicolás Maduro está creando mayor incertidumbre y enfrentamiento con la población al insistir con su proyecto de una Asamblea Constituyente.
Nota de Prensa
El 24 de mayo la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, informó que a finales de julio se realizará la elección de los integrantes de la Asamblea Constituyente, pese al rechazo de la mayoría de la población.
“Las consecuencias (de esta insistencia) son muy graves”, señaló el Purpurado. En declaraciones a ACI Prensa/EWTN Noticias advirtió que las autoridades están dejando de lado las necesidades del pueblo venezolano, como son la escasez de alimentos y medicinas, “para poner todo únicamente en un proyecto político”.
El Cardenal Porras dijo que el régimen de Maduro evita “una consulta auténtica al pueblo mediante una serie de subterfugios”.
“Esto nos preocupa grandemente porque lo que va a crear, que ya lo está creando, es una incertidumbre mayor y un enfrentamiento mayor con el resto de la población y lo que queremos es que haya realmente una salida pacífica, concertada para el bien de todos”, expresó.
Durante la entrevista, se le consultó al Arzobispo de Mérida sobre la reunión del 19 de mayo entre una representación del Episcopado y la comisión presidencial para la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
El Purpurado afirmó que la postura de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) ha sido siempre de estar abierta e invitar “a todos los sectores, no importa de dónde vengan, para conversar, para dialogar, para encontrar y crear esos puentes como nos pide el Papa Francisco”.
En ese sentido, dijo que en el encuentro los obispos pusieron en claro cuál “la postura firme que tiene la CEV” y se escucharon los planteamientos de la comisión. Sin embargo, señaló, “vimos por otro lado una negativa a responder a las preguntas que le hicimos sobre las necesidades del pueblo venezolano, que no son otras que aquellas que el Cardenal (Pietro) Parolin ya lo señaló en su carta del 1 de diciembre”.
En su carta, el Secretario de Estado Vaticano señaló como condiciones para continuar el diálogo, que el gobierno implemente medidas para aliviar la grave crisis de abastecimiento de comida y medicinas, que se concuerde con la oposición “el calendario electoral que permita a los venezolanos decidir sin dilaciones su futuro”, se liberen a los presos políticos y se restituya a la Asamblea Nacional “el rol previsto en la Constitución”.
Sin embargo, dijo el Cardenal Porras, la respuesta de la comisión presidencial “fue muy tajante: esto no nos corresponde a nosotros y vinimos pues simplemente a hablar del proyecto de Constitución”.
El Arzobispo de Mérida agradeció a la población por participar en la Jornada de Oración por la Paz realizada el domingo 21 en toda Venezuela.
Afirmó que se vivió el ansia “que hay de paz, de concordia, de fraternidad” del pueblo venezolano. “No es la violencia el camino del encuentro, sino de la muerte; y por ello, aunque parezca que se está arando en el desierto, es necesario que pensemos que hay una trascendencia, y que ese valor supremo de la vida humana y de la vida espiritual de cada uno de nosotros tiene que ser siempre no solo respetado, sino ayudado a que crezca para bien de todos”, expresó.
Finalmente, el Purpurado alentó a los venezolanos a mantener la esperanza, que es la virtud que ayuda “a mover montañas”. “Es la fuerza del Espíritu que nos lleva a saber que ese futuro está en nuestras manos y tenemos que construirlo”, afirmó el Cardenal, que invitó a los fieles a no dejarse “robar ni la alegría ni la esperanza con ese espíritu evangelizador que nos pide el Papa Francisco”.