El diputado de la Mesa de la Unidad Democrática en el estado Bolívar se solidariza con sus colegas Américo De Grazia y Armando Armas, agredidos por los colectivos oficialistas.
Nota de prensa
Las agresiones contra la sede de la Asamblea Nacional son una muestra de la intolerancia política, una patada al proceso democrático y la consecuencia del odio sembrado por el chavismo durante todos sus años de Gobierno, según el diputado de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Tony Geara.
Explica que desde que la oposición ganó por votos la mayoría en el parlamento venezolano, los chavistas han utilizado a sus colectivos paramilitares para amedrentar a los diputados de la MUD, dejando en evidencia su incapacidad para asumir las derrotas y el poco respeto que sienten por la voluntad del pueblo.
Comenta que este miércoles la orden de las hordas chavistas no era amenazar, sino agredir a los legisladores opositores y a todo el que se les atravesara. “Esto deja muy mal parada a la democracia venezolana, porque es la evidencia de un poder que manipula al pueblo para atacar a un grupo de ciudadanos desarmados, que solo están cumpliendo con su deber”.
Geara destaca que lejos de confrontar ideas y medirse por votos en los procesos electorales, el chavismo quiere convertir la política en el “ejercicio de los matones de barrio”, donde gana el que pega más duro.
“Ya no les interesa dónde o a quién apoya la mayoría del pueblo, sino exhibirse como los dueños de las armas y la fuerza, por eso convirtieron a Venezuela en un circo que el mundo observa con espanto”.
Víctimas de la barbarie
El legislador por el estado Bolívar manifestó su solidaridad con los diputados Américo De Grazia, de la Causa R, y Armando Armas, de Voluntad Popular, explica que ambos fueron víctimas de la barbarie y la intolerancia que sembró el fallecido Hugo Chávez desde su llegada a Miraflores.
“El oficialismo convirtió un país de hermanos en una nación de enemigos, una tierra reconocida por dar cobijo a todo el que lo necesitara, en una región donde se insulta, se agrede y se asesina al que piense distinto”.
Advierte que este proceso trajo como consecuencia el asalto al parlamento este miércoles 5 de julio, porque “los ciudadanos enardecidos por un discurso revanchista lleno de odio, se olvidan del respeto que merecen las instituciones o del derecho a la vida del resto de las personas”.
No se detienen
Geara advierte que esta situación sí preocupa a los diputados de la unidad, pero que no se van a dejar amedrentar por ella, porque piensan seguir tomando todas las medidas necesarias para rescatar a Venezuela de quienes la tienen secuestrada.
“Esta es una lucha que no vamos a parar porque nos ataquen los colectivos, porque es la lucha de un pueblo que quiere paz, democracia y libertad”.
Asegura que los legisladores seguirán en las calles, junto al pueblo que está decidido a mantener la lucha hasta que Nicolás Maduro deje el poder. (NP)