La gira de Pence, que comenzó en Colombia y ya le llevó a Argentina, se encuadra en una ofensiva diplomática estadounidense contra el gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro, y ha estado marcada por las declaraciones de Trump, quien no descartó la “opción militar” para intervenir en Venezuela.
AFP
Dichas declaraciones fueron rechazadas en Colombia por el presidente Juan Manuel Santos y en Argentina por el mandatario Mauricio Macri, durante la visita del vicepresidente estadounidense.
“Chile hará todo lo posible por apoyar a los venezolanos a encontrar el camino pacífico para restablecer su democracia, pero Chile no apoyará ni golpes de Estado ni intervenciones militares”, dijo Bachelet.
Pence suavizó las declaraciones de Trump, sosteniendo que cualquier actuación de su país se realizará “junto a nuestros aliados de la región”, y calificó de “mensaje poderoso” la carta suscrita la semana pasada en Perú por 12 países de la región en la que criticaron lo que consideran una ruptura democrática en Venezuela.
En sus declaraciones, Pence denunció que “el pueblo de Venezuela sufre y muere” bajo la “tiranía” de Nicolás Maduro y padece una pobreza extrema.
“Estados unidos va a usar toda su fuerza económica y diplomática para que se restaure la democracia en Venezuela”, aseveró.
Durante la visita de Pence, cerca de un centenar de personas realizaron protestas y quemaron banderas estadounidenses en el centro de la capital chilena.
Pence viajará a Panamá el jueves, el último destino de su gira latinoamericana.