Donald Trump cenará este lunes con mandatarios latinoamericanos en la previa de su debut en la Asamblea General de la ONU, en un encuentro que tendrá como eje la crisis en Venezuela.
El encuentro será en el New York Palace Hotel, donde llegarán los presidentes Juan Manuel Santos, de Colombia, Michel Temer, de Brasil, Juan Carlos Varela, de Panamá, y la vicepresidente argentina, Gabriela Michetti. Al encuentro también fue invitado el mandatario peruano Pedro Pablo Kuczynski, pero canceló su viaje luego de que el Congreso forzara el cese del primer ministro y todo su gabinete. Por su parte, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto decidió no asistir al encuentro.
Washington ha denunciado la dictadura en Venezuela y, a fin de presionar por un cambio, Trump firmó el mes pasado un decreto que prohíbe a las empresas de su país hacer negocios que permitan financiar al régimen venezolano o a la petrolera estatal PDVSA.
El último sábado, EEUU se mostró a favor de los primeros contactos entre el chavismo y la oposición: “Estados Unidos reitera su llamado a la restauración completa de la democracia en Venezuela. Apoyamos negociaciones serias que de buena fe logren este objetivo”.
Cuatro meses de protestas casi diarias que dejaron al menos 150 muertos han llegado a su fin, mientras una polémica y poderosa Asamblea Constituyente instalada en agosto apunta a los líderes de oposición. A su vez, la economía continúa en picada en medio de una inflación de tres dígitos y escasez de medicinas y comida.
Otro tema que podría estar sobre la mesa en la cena de esta noche es el del narcotráfico. La semana pasada, Washington advirtió en un memorando que podría “descertificar” a Colombia por el aumento de los cultivos ilícitos, hecho que fue tomado como una “amenaza” por el gobierno de Santos.
Desde que Trump llegó a la Casa Blanca en enero, Venezuela y el tráfico de drogas han sido sus principales preocupaciones en torno a la región, aunque la agenda también podría incluir el futuro de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.
El mandatario republicano hablará el martes en la Asamblea General, en un discurso en el que se espera que reitere sus críticas a la ineficacia de la ONU e insista con la necesidad de una reforma del organismo.