El drama de miles de adolescentes en estado de preñez está siendo utilizado, como otras tantas tragedias ciudadanas, por quien vistiendo liquiliques de fina estampa pareciera estar usando ropa maternal, tal vez eso lo inspiró, porque conmovido no está por la tendencia irreversible del embarazo precoz, y no se le pudo ocurrir mejor cosa que crear la misión “Barrigonas Felices de Venezuela”, reflejando que desconoce por completo esa materia concerniente a un montón de jovencitas que se ven por dondequiera como almas en pena.
Yo no digo que tal cosa sea un desacierto, eso sí, esa denominación viene a recordarnos que en este país el que no está creyendo en pajaritos preñaos viviría preñado de buenas intenciones e ilusiones, tal cual las muchachitas preñadas porque no hay anticonceptivos para contener los efectos de tantas ganas, iguales o mayores a las de aquellos empeñados en querer votar a cada rato sabiendo de antemano que corren el mismo riesgo de las adolescentes enamoradas.
La Fiscal Luisa Ortega Díaz, que no tiene nada de adolescente, anda como esas “Barrigonas Felices” de Nicolás, queriendo parir algo bueno, preñada de tan buenos deseos como animaladas que abultan el expediente por el cual debieron haberla dejado presa en La Haya cuando fue a pedir la orden de captura contra Nicolás Maduro, en una denuncia que incluye a Vladimir Padrino y Néstor Reverol. Ella mejor que nadie sabe que ese es un embarazo utópico, porque como muy bien le recordó Tamara Suju, su expediente entra a la Corte Penal Internacional por el artículo 15 del Estatuto de Roma, pues era “Cadena de Mando” en la estructura delictiva que denunció.
Un ex fiscal arrepentido, en otros tiempos fans enamorado de la “Fiscal Mamaracha” (término acuñado por Abelardo Izaguirre), Franklin Nieves, se mostró como preñado de erudición en las audiencias de la OEA, allá dijo: “En 1999 sin estar vigente la nueva Constitución, una comisión desintegró el poder judicial colocando a los jueces en condición de provisionalidad para poder destituirlos a discreción”, para rematar remendando el capote: “Fui coaccionado para acusar a Leopoldo López”. Con mansos corderos como estos hay que tener mucho cuidado, preñan a cualquiera para después echarle la culpa a otro.
Sabiendo que Venezuela es un “narcoestado violento”, como lo dijo la regia Embajadora de EEUU en la ONU, los negociantes no piden disolver la ANC, ni la liberación inmediata de todos los presos políticos, ni gobierno de unidad hasta las elecciones, ni nada que signifique un cambio inmediato. Para colmo de males, la misma asamblea que le declaró abandono de cargo a Nicolás Maduro ahora lidia con él, viéndolo como Presidente, rogándole que le devuelva sus competencias. Están entregados y aceptan todo lo que propone el gobierno, o sea, el régimen los preñó, de ahí su candidez.
Siguiendo en la onda política, Baruta está preñada de candidatos. Hay tantos candidatos “opositores” en Baruta que lo mejor que pudiesen hacer es formar un equipo de fútbol aunque sea bien chimbo, harían mejor papel que avalando el fraude del narcorégimen con lo cual también dejan ver su torpe ambición. Pero eso no es tan grave, los mosquitos Anopheles como que no cesan de preñar a sus hembras porque el Paludismo en Venezuela es una enfermedad que se está propagándose más rápido que las Barrigonas Felices de Nicolás sin que éste le preste la más mínima atención, no se sorprendan si crea la misión “Zancudo Loco”.
Félix Francisco Bertomolde