Se aproxima un nuevo periodo parlamentario, el tercero desde que la oposición venezolana logró vencer al régimen de Nicolás Maduro en los comicios del 2015, y el segundo de un estatus de desacato declarado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Por: Vanessa Rodríguez – @nessacrlupo / LaPatilla
A pocas horas de tener una nueva junta directiva, en LaPatilla queremos refrescar lo que han sido estos dos años de labor parlamentaria. Opacada, reprimida por el chavismo, pero reconocida y valorada por los venezolanos y la comunidad internacional, pese a artimañas impuestas por un gobierno decadente y desesperado por mantenerse en el poder.
Asamblea Nacional opositora
El 6 de diciembre de 2015 miles de venezolanos celebraron el triunfo de la oposición, en el que lograron un total de 112 curules, obteniendo la mayoría calificada para sancionar leyes habilitantes, designar y remover a los integrantes del Poder Electoral y aprobar voto de censura contra el vicepresidente de la República y al tren ejecutivo. Sin embargo, esto no duró mucho.
La AN saliente, en manos del oficialismo y encabezada por Diosdado Cabello, antes de entregar a la oposición se encargó de nombrar, de una manera “express”, a los nuevos Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, quienes serían los verdugos de los fraudes e irregularidades inconstitucionales que vendrían a continuación.
Tras la designación de los Magistrados express, una de sus primeras acciones y sin que los nuevos parlamentarios fueran juramentados, fue suspender la proclamación de los diputados de Amazonas Julio Ygarza, Nirma Guarulla y Romel Guzamana. Lo que dejaba al parlamento opositor con 109 diputados y una mayoría simple que permitía que la coalición de la Unidad sólo pudiera impulsar y aprobar iniciativas legislativas propias, entre ellas la junta directiva del Parlamento, un Secretario y Subsecretario, que se apruebe un referéndum consultivo, así como también autorizar la salida del presidente de la República por lapsos prolongados.
Con este inicio un poco truncado los parlamentarios opositores, quienes para entonces formaban una sola bancada, se firmó un pacto de gobernabilidad, donde se acordaba un esquema rotativo entre los diversos partidos políticos que forman la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para los cargos dentro de la Junta Directiva.
Ramos Allup a la cabeza
En el primer año la presidencia de la AN quedaba en manos de la tolda blanca, Acción Democrática, representada por su secretario General el diputado Henry Ramos Allup. El parlamentario asumió su rol enfrentando, en muchas oportunidades, con su verbo muy peculiar a los distintos personeros del Gobierno, incluso al mismo presidente de la República, Nicolás Maduro. Así como a varios colegas, como fue el caso del diputado Pedro Carreño al que interpeló y le aseguro que “de inteligencia no iba a morir”.
Del mismo modo, se impuso ante el Supremo y juramentó a los tres parlamentarios resegados, lo que conllevó a que la decretaran en desacato. El 11 de enero de 2016 el TSJ declaró que los actos de la nueva Asamblea son y serán nulos mientras los tres diputados opositores de Amazonas estuvieran incorporados a la cámara.
Entre varios ir y venir, apelaciones y discusiones, Ygarza, Guarulla y Guzamana decidieron solicitar su desincorporación ante el Parlamento en diciembre de ese año y fue concretado en siguiente periodo electoral, encabezado por Julio Borges.
Vale destacar que este no fue el único episodio de ilegalidades cometidas por el Poder Judicial hacia el Parlamento. Leyes, acuerdos, proyectos y toda resolución discutidas y aprobadas por la cámara de diputados eran anulados por las diferentes Salas del TSJ.
Durante la presidencia de Ramos Allup el Parlamento sesionó en 96 oportunidades donde 32 proyectos de Ley fueron aprobados en primera discusión y tres en segunda. 15 leyes se aprobaron, sin embargo la gran mayoría de estas fueron declaradas nulas, en la guerra de poder entre el TSJ y Ejecutivo contra la AN.
De igual forma, se realizaron un total de 29 informes para el ejercicio de la función de control sobre el Gobierno y la administración pública, 14 exhortos y se llevaron a cabo 60 debates.
Por otro lado, se solicitó la comparecencia en el hemiciclo de tres tres ministros, se otorgó un voto de censura al entonces ministro de Alimentación Marco Torres y declaró la responsabilidad política de cuatro funcionarios públicos, entre ellos Rafael Ramírez y Carlos Osorio.
2017 Una nueva junta
Llega el 5 de enero de 2017 y una nueva Junta directiva es nombrada, como se habría acordado el año anterior la presidencia de la AN paso a manos del partido político Primero Justicia, con el diputado Julio Borges. Quien en sus de primeras decisiones aprobó la desincorporación solicitada por los diputados de Amazonas para así salir del estado de desacato en el que se encontraba (y encuentra) la Asamblea. Igualmente, amplió las relaciones con la Comunidad Internacional en la coayudó en demostrar que un régimen dictatorial se había instalado en Venezuela.
En la primera sesión ordinaria del 2017, a través de un punto de información se hizo oficial la desincorporación de los diputados del estado Amazonas con la votación de la mayoría opositora de la cámara. Sin embargo, y como era de esperarse, el TSJ no aceptó está decisión, alegando que habría que anular la juramentación de estos y no la renuncia voluntaria como ocurrió.
Del mismo modo, Julio Borges en varios de sus discursos hizo llamados directos a la Fuerza Armada Nacional para que cumplieran y recordaran su rol, con los venezolanos y con el país ante la dictadura impuesta. Llamados que quedaron sin respuestas positiva para el parlamento y para la ciudadanía.
Golpes al Parlamento
El 20 de marzo el Tribunal Supremo de Justicia lanzó su estocada más grave, las sentencias 155 y 156 de la Sala Constitucional, en las que se habilitaba a Maduro a legislar y bloqueaba las funciones de la AN. Estas sentencias contra el Parlamento llevó a la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, quien hasta la fecha era uno de los personajes más importantes del chavismo, a declarar la Ruptura del Hilo Constitucional. Así como también llevó al país a una serie de protestas para defender la institucionalidad de los Poderes en Venezuela.
Otro hechos resaltante y conmovedor de este periodo parlamentario fue el segundo asalto a la AN. Vale recordar que el 23 de octubre del 2016 un grupo de oficialistas irrumpió en el Palacio Legislativo. Sin embargo, durante la sesión del 5 de julio de 2017 un nuevo golpe al Congreso conmocionó aún más a los venezolanos y la Comunidad Internacional, cuando las paredes del Palacio Legislativo se tiñeron con sangre.
Con objetos contundentes los adeptos al régimen agredieron al menos a 12 personas, cinco diputados y siete trabajadores de la Asamblea Nacional. La relevancia de este arrebato de agresividad quedó plasmado en ciento de fotos y videos que documentaron tan atroz acción.
Como estos golpes no fueron suficientes para doblegar a los parlamentarios que buscan recuperar a la Venezuela democrática y libre, Nicolás Maduro convocó a una para Asamblea Nacional Constituyente (ANC), la cual restaría funciones a la AN opositora oficializando un nuevo Golpe al Parlamento.
Dicha ANC se instaló también en el Palacio Federal Legislativo, sede principal de la Asamblea Nacional, en la que en muchas oportunidades negaron el acceso a los diputados opositores a los salones sesiones, así como a las instalaciones. Para responder a los venezolanos que votaron aquel 6 de diciembre de 2015 por una AN diferente, los parlamentarios recurrieron a las calles y plazas del país para desarrollar el “parlamentarismo de calle”.
Una de las sesiones más emblemáticas durante ese período, fue la designación de un nuevo Tribunal Supremo de Justicia. Que, como era de esperar, fue anulada apresando a uno de los nuevos Magistrados y obligando a los otros al exilio.
Borges y la Comunidad Internacional
Uno de los aportes más relevantes que dejó el paso del diputado Julio Andrés Borges por la presidencia de la Asamblea Nacional fue el valor agregado que le dio la Comunidad Internacional en reconocimiento de la legitimidad del Parlamento, ante las atrocidades cometidas por el régimen.
Borges viajó a Europa, donde en una de las oportunidades fue recibido por el papa Francisco, quien afirmó que deseaba una “solución democrática” a la compleja situación que atravesaba Venezuela, y que con el pasar de los meses se ha acrecentado.
Fue recibido por los presidentes Emmanuel Macron y Mariano Rajoy, así como por la canciller alemana, Angela Merkel y la primera ministra británica, Theresa May. También se le otorgó el premio Sájarov, por la lucha que ha tenido la oposición venezolana por el respeto de los derechos humanos
En la región americana el presidente del Parlamento habló en el Congreso de Colombia y lo recibieron en el de Brasil; así como también el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, le brindó Honores de Estado.
Al culminar este segundo periodo parlamentario, y pese a las irrupciones que tuvo que vivir la Asamblea Nacional, los diputados aprobaron 48 acuerdos, 2 mociones, 2 informes y 1 reconocimiento, sentenciados y anulados por el TSJ.
Tercer periodo parlamentario, la incertidumbre
Este viernes, 5 de enero de 2018, inicia un tercer periodo parlamentario en el que la incertidumbre rodea los días previos. Según el acuerdo planteado el primer año, la presidencia de Junta Directiva le corresponde al partido Un Nuevo Tiempo, quien para el momento de la redacción de este trabajo no ha informado el nombre del diputado que los representará y dirigirá a sus colegas parlamentarios.