Dos oficiales de la Policía del estado Táchira -Politáchira- resultaron heridos en momentos que sujetos desconocidos los atacaron a tiros cuando se encontraban laborando dentro de las instalaciones del Centro de Coordinación Policial de La Fría, donde los antisociales les efectuaron las ráfagas con armas automáticas desde un vehículo en marcha.
El atentado ocurrió a las 11 de la noche del lunes, según trascendió a los medios de comunicación y en el momento que al menos tres uniformados se hallaban en el área de prevención en su rutina diaria, quienes lograron repeler rápidamente a los antisociales y utilizar sus armas de dotación para evitar que estos hirieran o mataran a otros uniformados.
En el intercambio de disparos resultó herido el supervisor agregado Richard Porras, quien recibió un tiro en el lóbulo de una oreja; y la oficial agregada Alba Suárez, que llevó la peor parte, pues un balazo le impacto en la región de la espalda, con orificio de salida en la zona torácica.
La oportuna reacción de los efectivos policiales causó que los atacantes optaran por huir rápidamente de la zona; no obstante, los mismos uniformados lograron comunicar en pocos minutos a través de las frecuencias policiales la situación, por lo que las diversas unidades motorizadas y de patrullaje que se hallaban en ese momento de servicio en la calle emprendieron la búsqueda del automotor y los sospechosos.
Con la descripción, unos patrulleros localizaron el vehículo, que se desplazaba a alta velocidad en el sector de Las Pipas, en predios del distribuidor de La Fría, donde además un motociclista escoltaba al carro sospechoso.
Al verse cercados por los uniformados, según se afirma, el motociclista disparó contra la comisión policial, por lo que nuevamente se originó un enfrentamiento.
Ante la posibilidad de poder ser capturados, los antisociales que se desplazaban en el vehículo optaron por bajarse del mismo y abandonarlo para internarse en medio de la vegetación, no sin antes efectuar múltiples disparos contra los policías.
La decidida intervención de los miembros de Politáchira causó que igualmente el motociclista huyera, ya que por poseer una moto de alto cilindraje se le facilitó el escape.
Tras constatar que los atacantes lograron evadirse, los funcionarios policiales optaron por revisar el automotor que estos dejaron abandonado y se encontraron con un hombre atado de pies y manos en el portamaleta del carro, quien reveló que era dueño del mismo y que había sido secuestrado por dos sujetos, quienes le habían contratado para una carrera en el Terminal de La Fría; por lo que se deduce que los homicidas le plagiaron junto al vehículo para perpetrar el atentado.
El automotor recuperado fue trasladado a la sede de la policía científica para la reactivación de huellas digitales.
Oficiales se recuperan del ataque
Los dos oficiales heridos fueron recluidos en un centro médico privado de La Fría, en donde fue desplegada vigilancia policial y militar en previsión de cualquier otro atentado.
El supervisor agregado Richard Porras, que sufrió una herida en una de sus orejas, se encuentra fuera de peligro; mientras que la oficial agregada Alba Suárez fue intervenida quirúrgicamente de emergencia y le fueron extirpados un riñón y parte del colon.