El río Sena, desbordado en algunos tramos a su paso de París, sigue subiendo hoy de nivel y lo continuará haciendo hasta el fin de semana, lo que ha llevado al cierre de vías de circulación, infraestructuras de transporte público e incluso una parte del Museo del Louvre.
Joël Hoffman, director adjunto de Vigicrues, el organismo de vigilancia de los ríos, señaló en una entrevista a la emisora de radio “France Info” que esta mañana se había superado el umbral de los 5,40 metros de altura sobre el nivel de referencia en el Sena.
Ese ascenso “va a continuar hasta la noche del viernes al sábado, cuando llegaremos a un máximo de 6 metros (…) que se va a prolongar durante varios días”, en particular por la aportación del río Marne, precisó Hoffman.
A eso va a contribuir un frente de lluvias que atraviesa Francia hoy de oeste a este, y que va a dejar cantidades de hasta 30 litros por metro cuadrado en algunos departamentos en torno a París, según los servicios meteorológicos.
Météo France mantiene esta mañana 15 departamentos del centenar que hay en Francia en alerta por riesgo de inundaciones, todos ellos en el norte y el noreste.
Ese riesgo se concentra, esencialmente, en las cuencas del Sena (y muy particularmente por el Marne) y en la del Saone (afluente del Ródano), en este caso sobre todo por las aportaciones del Doubs.
En la región de la capital, varios ayuntamientos han decidido proceder a la evacuación con carácter preventivo de algunos de sus barrios próximos al río, en particular en Joinville le Pont y en Villeneuve Saint Georges.
En París, donde buena parte de las vías de circulación en los muelles del Sena están cerradas, en parte sumergidas por las aguas, y desde ayer no circulan los trenes en siete estaciones de una de las líneas de trenes de cercanías, la RER C, en un tramo que se sitúa paralelo al río. Seguirá cortado al hasta el 31 de enero.
El Museo del Louvre, que se encuentra también a orillas del Sena, decidió ayer cerrar el nivel inferior del departamento de Artes del Islam, y tiene activada una célula de crisis desde comienzos de la semana para examinar la evolución.
También se está haciendo un seguimiento y una evaluación de posibles medidas ante la crecida en una veintena de otras instituciones culturales, como los museos de Orsay y del Quai Branly, ambos también junto al río.
En la mente de todos están las inundaciones que afectaron en mayo-junio de 2016 a la región de París (entonces el nivel del Sena llegó a 6,10 metros) y otras vecinas, y que causaron la muerte a dos personas, además de daños materiales superiores a los 1.000 millones de euros.
En 1910, la situación llegó a ser de una gravedad catastrófica cuando el río en París subió hasta 8,62 metros. EFE