La diputada a la Asamblea Nacional (AN) y sub-jefa de la Fracción Parlamentaria 16 de Julio, Dignora Hernández, en compañía de un grupo de mujeres pertenecientes a la Fundación Venezolana Voces Enfermedades Inflamatorias Intestinales (FUNDAVEII), denunció ante la Comisión Permanente de Familia del parlamento venezolano que “este régimen cínico se esconde tras las faldas de ‘la igualdad y la justicia social’ para acabar con la institucionalidad democrática y la familia”.
“Las mujeres venezolanas son víctimas de un régimen desesperado que niega alimentos, medicinas y futuro a la familia venezolana”, sumó.
La dirigente del partido de la libertad calificó la inacción del régimen de Nicolás Maduro como “el más vil y reprochable de sus actos”, al considerar que si bien todos los venezolanos, independientemente de su sexo y edad están expuestos a las mismas condiciones, la ausencia de la madre afecta la estructura familiar.
Asimismo, indicó que la dictadura creó leyes a conveniencia “porque pensaron que serían eternos y nunca tendrían que cumplirlas”. Y agregó: “Quizá poca gente en Venezuela sepa que existe una Ley para la protección de las familias, la maternidad y la paternidad”.
A juicio de Hernández, ese instrumento legal debe ser evaluado para adaptarse a los nuevos tiempos, pues en cuanto salgamos de este régimen, necesitaremos de un marco jurídico que permita reconstruir la República, y esto no será posible sin la familia.
Para la parlamentaria, es una falta de respeto que la dictadura haga alarde de haber “promulgado una la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres”, que estipula que la violencia contra la mujer comprende todo acto que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, emocional entre otros, ya que actualmente son los jerarcas del régimen los principales agresores de los derechos de las mujeres y familias venezolanas.
Finalmente, la parlamentaria de Vente Venezuela señaló que la dictadura “vulnera los derechos de la familia y que genera deliberadamente esta dantesca situación”, que representa la negación del progreso, bienestar y futuro de los venezolanos. El llamado es, por tanto, a detener la destrucción de la República y retomar el sendero democrático.