Altos funcionarios de los países de la OPEP y Rusia dijeron que la disminución de la producción de Venezuela no representa un desafío para el mercado.
Por Argus Media | Traducción libre el inglés por lapatilla.com
Una fuerte caída en la producción nigeriana y el empeoramiento de los problemas aguas arriba de Venezuela llevaron a la producción de la OPEP a un mínimo de nueve meses a 32,14 millones de b / d en enero. La producción de Venezuela en enero fue de 1,55 millones de b / d según fuentes secundarias, un descenso de 23 puntos porcentuales en el año.
“No hay ningún plan para hacer nada (sobre la producción de Venezuela) en este punto“, dijo el asesor del Ministerio del Petróleo saudí Ibrahim Al-Muhanna hoy en la conferencia CERAWeek en Houston. “El mercado no ha alcanzado el punto de equilibrio … no hay necesidad de abordarlo este año“.
El subsecretario del Ministerio de Energía de los Emiratos Árabes Unidos, Matar al-Neyadi, hablando en un foro del Centro Universitario de Columbia sobre Política Energética Global la semana pasada, también restó importancia a la crisis de Venezuela. “No creo que sea importante“, dijo al-Neyadi. “Si sucede, el mercado reaccionará“.
Los restantes miembros de la OPEP deben cumplir sus propias obligaciones en virtud del acuerdo con los productores que no pertenecen a la OPEP, independientemente de lo que esté sucediendo en Venezuela, dijo el primer viceministro de energía ruso, Alexei Texler, en CERAWeek.
“La implementación del acuerdo desde niveles generales es imprescindible“, dijo Texler. “Lo más importante para nosotros es que la OPEP implemente sus obligaciones por completo“.
La AIE en su informe Oil 2018 publicado ayer advirtió que la producción de Venezuela podría descender en casi 700,000 b / d para el 2023, desde los ya bajos niveles alcanzados en el 2017. “Puede haber razones para que revisemos aún más las expectativas a la baja en Venezuela“. El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, dijo.
Restaurar la producción de Venezuela sería una tarea difícil, dijo la estratega jefe de productos básicos de RBC Capital Markets, Helima Croft, en la conferencia CERAWeek.
“Estamos viendo la erosión permanente de su producción“, dijo Croft. “Las instituciones de Venezuela están erosionadas y los niveles de deuda son masivos. Cuando te encuentras en una crisis, esos barriles no vuelven“.
Croft dijo que esperaba que la producción de Venezuela continúe disminuyendo de forma gradual, en lugar de experimentar un repentino descenso catastrófico que sería más probable que provoque una respuesta de otros miembros de la OPEP.
Venezuela presenta el mayor riesgo de interrupción en el suministro entre los miembros de la OPEP, dijo el economista jefe de Adnoc de Abu Dhabi, Kamel Ben Naceur. Las proyecciones de la AIE indican un descenso potencial a 1mn de b / d en 2023 para el país, “una situación dramática“, dijo Ben Naceur.
La caída de la producción venezolana provocó una caída igualmente abrupta de las importaciones de crudo de ese país de Estados Unidos, incluso cuando Washington considera sanciones para el sector petrolero venezolano, además de sanciones individuales y financieras específicas.
La administración de los Estados Unidos no ha impuesto nuevas sanciones, a pesar de que se espera que primero prohíban las exportaciones de crudo dulce ligero y nafta de los EE. UU. a Venezuela
“Esto exige la cuidadosa adaptación de las sanciones“, dijo hoy el subsecretario de Estado adjunto, John McCarrick. Estados Unidos “no está inclinado a salir … de nuevo, eso es hasta la fecha … en sancionar al sector energético porque nos preocupa no solo a Venezuela, sino también a los países vecinos que dependen del suministro de Venezuela para sus propias necesidades“.