El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió este jueves con ejecutivos de la industria de videojuegos, después de haber apuntado al sector como uno de los factores que estimulan conductas violentas en el país tras el fatal tiroteo ocurrido el mes pasado en una escuela secundaria de Florida, reseñó Reuters.
La reunión incluyó a legisladores, críticos de los videojuegos y ejecutivos de Take-Two Interactive Software Inc, desarrollador de “Grand Theft Auto”, y ZeniMax Media Inc, propietario de “Doom”. El hermano menor de Trump, Robert Trump, está en el consejo directivo de ZeniMax.
Trump citó la influencia de los videojuegos después de que un joven 19 años mató a tiros a 17 personas en una escuela secundaria de la ciudad Parkland, en el estado de Florida, y dejó heridas a más de una decena.
La sesión del jueves fue cerrada a los medios de comunicación poco antes de que comenzara cuando un evento no relacionado se agregó al cronograma de Trump.
La conversación duró casi una hora y fue “intensa” pero “respetuosa”, y Trump pareció estar interesado en escuchar a todas las partes, dijo Melissa Henson del Parents Television Council, un grupo que aboga contra la violencia y el sexo en la industria del entretenimiento.
Henson, que tiene un hijo de nueve años, dijo que cree que deberían existir clasificaciones más detalladas de los videojuegos para los padres.
Trump hizo del tema algo personal al mencionar la semana pasada la preocupación por su hijo de 11 años, Barron. “Veo algunas de las cosas que está mirando y digo ‘¿cómo es eso posible?'”, dijo el presidente.