Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana llegaron aproximadamente a las 4:23 pm a la Comandancia General de la Policía de Carabobo, donde este miércoles se produjo un motín y un incendio que dejó 78 muertos según fuentes extraoficiales.
Los militares resguardan la entrada a la Comandancia, reseñó El Carabobeño en su portal web. Sin embargo, los familiares de los reos se mantienen en los alrededores del recinto exigiendo información sobre el suceso.
“A la entrada del comando policial llegó una patrulla con unas bolsas negras, cuya cantidad no se apreciaba a la distancia; quien las llevaba portaba un uniforme azul que decía Tanapatólogo. En la medicina forense son los encargados de preparar a los cadáveres”, informó el medio regional.
Trascendió que las autoridades no suministrarán información sobre lo ocurrido. Los familiares de los presos fueron reprimidos con bombas lacrimógenas cuando exigían información en horas de la tarde. Algunos de ellos se desmayaron por efecto de los gases.
Con información de El Carabobeño