Un adolescente fue contratado para que prestara el servicio miniteca en una fiesta en Naguanagua, pero cuanto intentó quitar la música, unos malandros le dispararon y lo mataron, reseña el diario El Carabobeño.
La víctima de este hecho fue identificada como Royer Jeampierre Jaimes Jiménez de 15 años, estudiante del tercer año de bachillerato, quien en sus ratos libres trabajaba con una miniteca.
De acuerdo a lo indicado por sus familiares en los alrededores de la morgue de la Ciudad Hospitalaria Doctor Enrique Tejera, la fiesta se desarrollaba en las invasiones Brisas Marinas, frente al club El Retobo. Como el contrato de Jaimes Jiménez era hasta las tres de la madrugada, a esa hora quitó el sonido.
Esta actitud no fue del agrado de unos sujetos que estaban disfrutando de la fiesta, quienes bajo amenaza lo conminaron a que pusiera de nuevo la música. El joven accedió, pero con menos volumen, lo cual disgustó a los hombres.
Uno de los acompañantes del muchacho llamó a una comisión policial, cuyos miembros lo único que hicieron fue mandar a quitar la música y se retiraron. El adolescente volvió a quitar la música, por lo que uno de los sujetos le disparó.
Jaimes Jiménez huyó herido de la casa y se escondió para que los tipos no le volvieran a disparar. Uno de sus amigos lo encontró y lo trasladó al Hospital Universitario Doctor Angel Larralde, donde murió este lunes a primeras horas de la mañana.