Casi 300.000 personas están a oscuras en la convulsa frontera colombiana con Ecuador, a raíz de un atentado atribuido este jueves por el ejército a la guerrilla del ELN.
AFP
El ataque, que afectó a una torre de energía, dejó sin el servicio eléctrico a cinco municipios del departamento de Nariño, incluido Tumaco, epicentro de una operación militar contra guerrilleros que se apartaron del proceso de paz con las FARC.
Según el comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Alberto Mejía, detrás de la acción está el Ejército de Liberación Nacional (ELN), grupo rebelde que dialoga con el gobierno.
“Fue el ELN – lo confirmo – el sitio donde sucedió este atentado terrorista es un sitio donde delinque el Frente Comuneros del Sur del ELN”, dijo a Blu Radio.
Considerada la última guerrilla activa en Colombia, esa organización guevarista negocia un acuerdo de paz con el gobierno en medio del conflicto.
Quito, que desde febrero de 2017 acogía las conversaciones, se marginó del proceso el miércoles, en rechazo a la inusitada violencia que enfrenta en la zona limítrofe y que según ambos gobiernos involucra a las disidencias de las ya disueltas FARC.
El problema rebasó el límite con el asesinato en cautiverio de los tres miembros de un equipo de prensa ecuatoriano que había sido secuestrado el 26 de marzo.
Los cuerpos aún no han sido recuperados y se cree que están en el lado colombiano.
El ELN y el gobierno colombiano están definiendo la nueva sede de las conversaciones que podría ser Cuba, Brasil, Chile o Noruega.