Las operaciones militares egipcias contra una rama del grupo Estado Islámico (EI) en el norte del Sinaí amenaza con provocar una “crisis humanitaria inminente”, dijo la organización Human Rights Watch (HRW) este lunes.
La operación “Sinaí 2018”, lanzada el 9 de febrero, llevó a que “hasta 420.000 habitantes de cuatro ciudades del noreste tengan una necesidad urgente de ayuda humanitaria”, consideró HRW en un comunicado.
“Sinaí 2018” estuvo acompañado por “una marcada disminución de las reservas de alimentos, de medicamentos, de gas para cocinar y de otros bienes comerciales esenciales”, lamenta la oenegé estadounidense, que se basa en testimonios de periodistas locales y de residentes, en artículos de prensa y en imágenes de ciudadanos.
HRW señala también las restricciones en la venta o el uso de gasolina, los servicios de telecomunicación e incluso el acceso al agua y la electricidad en ciertas zonas.
“Una operación antiterrorista que pone en peligro la circulación de bienes esenciales a cientos de miles de civiles es ilegal y no puede contener la violencia”, consideró Sarah Leah Whitson, directora del HRW para Oriente Medio y el Norte de África.
Desde el lanzamiento de “Sinaí 2018” el ejército afirma, apoyándose en imágenes, que proporciona asistencia humanitaria y distribuye víveres a la población. Y asegura que los ciudadanos apoyan la operación y participan activamente en ella proporcionando informaciones a las fuerzas de seguridad.
Desde la destitución por el ejército del presidente islamista Mohamed Mursi, en 2013, las fuerzas de seguridad enfrentan a grupos yihadistas, como el grupo EI, que lleva a cabo una insurrección en el norte de la península del Sinaí.
Desde el lanzamiento del programa, murieron más de 100 yihadistas y al menos 30 soldados, según cifras oficiales. AFP