La alta representante de la Unión Europea (UE) para la política exterior, Federica Mogherini, y el enviado especial de la ONU en Siria, Staffan de Mistura, pidieron hoy el cese de las hostilidades en el país tras más de siete de conflicto, “por razones políticas y humanitarias”.
“Más actividad militar no abre la vía para una solución política, la hace más difícil. Necesitamos silenciar las armas por motivos humanitarios y políticos”, afirmó Mogherini en una rueda de prensa conjunta con el representante de Naciones Unidas, el primer día de la conferencia de donantes que se celebra hoy y mañana en Bruselas.
Tras una primera jornada de reuniones con representantes de la sociedad civil siria Mogherini esperó “ahondar en la discusión política” mañana, en la que participarán 85 delegaciones nacionales, entre ellas la española, con representantes de Rusia e Irán, que no participaron en la conferencia del año pasado, aunque aún no se ha confirmado quién representará sus delegaciones.
Mogherini subrayó que Siria “no es un tablero de ajedrez ni un juego político” y pidió acabar con el “dramático bloqueo” del conflicto “dando voz a los sirios, que son quienes más han sufrido esta guerra interminable”.
El mediador de la ONU, por su parte, destacó la necesidad de que la sociedad civil siria forme parte de la comisión constitucional, pactada a finales de enero en la ciudad rusa de Sochi, un paso clave para el proceso de paz que aún no ha recibido el respaldo de Damasco, así como la celebración de unas elecciones supervisadas por esta organización.
“Lo cierto es que todo el mundo tiene una solución política diferente por lo que necesitamos trabajar en ello. Es tiempo para la alta diplomacia”, admitió De Mistura.
El diplomático también alertó de la situación en la provincia de Iblid, fronteriza con Turquía, y el temor de que esta se convierta en “un nuevo Alepo o Guta”, que han sufrido una situación humanitaria dramática a causa de los ataques.
“Hay una necesidad de bajar la temperatura y buscar el lugar para la diplomacia. En Siria hay una división sin resolver”, agregó, y esperó que los encuentros de mañana en Bruselas, en los que no están representados el Gobierno sirio ni la oposición, sirvan para “encontrar juntos una solución política”.
La UE y la ONU esperan superar en esta conferencia el compromiso de 5.630 millones de euros alcanzado en 2017 para asistir a los ciudadanos sirios y las comunidades de acogida de refugiados.
EFE