Un buque de la compañía de cruceros estadounidense Victory Cruise Lines hizo hoy su primera escala en La Habana tras un recorrido por varias ciudades de Cuba en su viaje inaugural al país caribeño. EFE
Esta es la quinta empresa estadounidense que realiza operaciones hacia Cuba y antes de atracar el barco Victory I en el puerto de la capital cubana visitó primero la ciudad oriental Santiago de Cuba y las centrales Sancti Spíritus y Cienfuegos para un recorrido programado en diez días.
El presidente de la compañía, Bruce Nierenberg, explicó que desde la creación de la naviera, a finales de 2015, existió la intención de incluir a Cuba entre sus destinos por razones como la cercanía a Estados Unidos y las particularidades de la nave para realizar viajes por las costas, según cita la agencia local Prensa Latina.
Nierenberg consideró que se trata de una variante de viaje que permite apreciar la isla, al visitar cada ciudad, donde los pasajeros pueden conocer sobre la cultura, la historia y las comidas del país.
El barco de la empresa Victory permanecerá en el puerto de La Habana hasta el próximo sábado, cuando regresará a Miami (EE.UU.).
Se tiene previsto volver a la isla a finales de octubre, y repetir el viaje en noviembre próximo y luego en enero de 2019.
Actualmente operan en Cuba 17 compañías de cruceros con 25 barcos, con un crecimiento del 28,6 % en el primer trimestre de este año, según datos del Ministerio del Turismo de la isla.
Las compañías de cruceros estadounidenses Carnival Cruise Line, Royal Caribbean Cruise, Norwegian Cruise y Pearl Seas LLP, viajan a Cuba desde el año 2016 con autorización del Gobierno de Estados Unidos y a ellas se suma ahora Victory Cruise Lines.
El primer crucero de Estados Unidos en viajar a Cuba en más de 50 años fue el buque Adonia, de Carnival, el 1 de mayo de 2016, tras obtener la licencia para operar en la isla, uno de los pasos del proceso de normalización de las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Cuba iniciado en diciembre del 2014, bajo la presidencia de Barack Obama.
Según un estudio del Consejo Comercial y Económico Estados Unidos – Cuba, las líneas de cruceros acumularán más de 761 millones de dólares en ingresos brutos entre 2017 y 2019 al transportar a más de 570.000 pasajeros, pese a las trabas impuestas por la actual administración de Donald Trump a los viajes de los estadounidenses a la isla.
De las doce categorías autorizadas a los ciudadanos de Estados Unidos para viajar a Cuba -entre ellas por motivos religiosos, culturales, educativos y de ayuda humanitaria- el Gobierno de Trump ha eliminado la de los intercambios personales con el pueblo cubano, que era la que facilitaba más visitantes estadounidenses a la isla.
No obstante, el número de viajeros de Estados Unidos logró récord en 2017, al situarse en 619.777, casi el triple de la cifra registrada un año antes, y ese país se ubicó entre los mercados con mayor crecimiento en ese ejercicio, de acuerdo con recientes informes de las autoridades turísticas cubanas.