Mindfulness (o la plena atención) es una práctica que permite entrenar nuestra mente para manejar el estrés. Estos son los consejos para llevar a cabo la práctica de mindfulness a tu vida cotidiana y tener un día de trabajo más saludable y menos estresante, reseña Inspirulina.
1. La “Aceptación Estratégica”: Cuando notes que tu nivel de estrés está incrementando, no trates de forzarte a estar alegre o calmarte a como dé lugar.
El primer paso para regresar al equilibrio es simplemente aceptar lo que estás sintiendo en ese momento. No significa que debas resignarte a una mala situación laboral, sino es aceptar cómo son las cosas en el momento antes de planear qué puedes hacer para mejorarla.
Se denomina “aceptación estratégica” ya que se realiza en el calor de la batalla; es decir, en el momento en el que surge una situación estresante.
2. Prueba darte un espacio para respirar durante 3 minutos: en tu escritorio o en un lugar silencioso toma tres minutos, deja de hacer la actividad que estás realizando e inhala y exhala profundamente, lleva tu atención a la respiración y a tu cuerpo como un todo.
Regresa a la actividad que estabas realizando de manera consciente.
Esta práctica te ayudará a clarificar tus pensamientos, a tranquilizar tu aproximación global a la vida, así como ser más productivo al estar presente e informado acerca de lo que sucede.
Puedes realizarlo 2 -3 veces al día.
3. Sintoniza las distracciones que están a tú alrededor: en las oficinas es común que existan muchos distractores, ya sea que tu compañero de trabajo sea muy ruidoso o los teléfonos suenan constantemente, etc.
Una forma de prevenir que estos sonidos te estresen es: prestar atención a los distractores en lugar de tratar de apagarlos o “no escucharlos”.
Nota gentilmente los sonidos y ve si eres consciente de los efectos que tienen en tu cuerpo.
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